La aerolínea regional Swisswings presenta suspensión de pagos
La compañía aérea regional suiza Swisswings se ha declarado en suspensión de pagos y ha suspendido todos sus vuelos. Víctima de las consecuencias para el sector de los atentados del pasado 11 de septiembre, la compañía recibió el golpe de gracia con la quiebra del constructor aeronáutico Fairchild Dornier. En busca de liquidez, Swisswings proyectaba la venta de dos de sus cinco aviones de esa marca, que perdieron de pronto su valor.
Swisswings pretendía vender dos aviones Fairchild y obtener unos ingresos de algo más de 10 millones de dólares (11,4 millones de euros) y alquilarlos posteriormente en régimen de arrendamiento financiero o leasing al eventual comprador. También fracasó en sus intentos de llegar a una sociedad conjunta con alguna de las grandes compañías europeas (Air France, Lufthansa o KLM), pues cada una de éstas tiene ya su propia compañía regional.
Swisswings tampoco consiguió reducir sus costes de mantenimiento, a pesar de la venta de su filial ASB. El aumento de capital realizado en agosto del año pasado como parte del programa de saneamiento no tuvo éxito.
La nueva compañía nacional suiza Swiss, sucesora de Swissair, se ha negado tajantemente a ayudar a la única compañía regional suiza que quedaba tras la desaparición de Crossair, cuya flota se ha integrado en Swiss. Sí se ha comprometido a repatriar gratuitamente a los 570 pasajeros abandonados a su suerte por Swisswings.