La Bolsa pierde en la semana un 0,96%, aunque conserva el 8.000
La Bolsa española ha vivido una semana de incertidumbre, con el precio del petróleo disparado y la tensión en Oriente Próximo. El Ibex avanzó ayer el 0,07% y se mantiene por encima del nivel técnico y psicológico de los 8.000 puntos, que casi pierde a mediados del periodo. En la semana ha caído el 0,96%.
Tres asuntos centraron ayer la atención de los inversores en Bolsa. Primero, el anuncio de que la Administración Bush ha enviado a Colin Powell al polvorín de Oriente Próximo. Segundo, la cifra de paro en Estados Unidos, que aumentó 0,2 puntos; no era lo que esperaban los expertos, pero tampoco la distorsión es grande. Finalmente, el rosario de resultados empresariales conocidos ayer en Wall Street.
Tres referencias que, por otra parte, se han mantenido durante la semana. La violencia en Oriente Próximo ha empujado al alza los precios del barril del petróleo, hasta situarlos por encima del nivel de los 25 dólares, que es la cota técnica asumible por los países industrializados. Por encima de ella, peligra la reactivación económica en ciernes, como ya ha reconocido el BCE el pasado jueves y el control de la inflación.
Respecto a los resultados empresariales, los mercados estadounidenses, principalmente el tecnológico Nasdaq, han mostrado una gran sensibilidad a la nueva oleada de advertencias negativas. El consenso es, con todo, que éstos mejorarán respecto al último trimestre de 2001, ya que como adelantaban los analistas esta semana las compañías se han empleado a fondo en la reducción de costes.
La cifra de empleo divulgada ayer tuvo, como siempre, una influencia clara en la evolución de las Bolsas europeas. Wall Street abrió al alza, pese a que la tasa de empleo se situó en el 5,7% frente al 5,6% que esperaba el consenso. Sin embargo, el mercado interpretó positivamente la noticia, puesto que la economía estadounidense ha incrementado el número de trabajadores por primera vez desde julio.
Las Bolsas del Viejo Continente cerraron la jornada al alza, aunque con avances que no superaron el 1%. En el caso del Ibex fue del 0,07%. En la semana pierde, sin embargo, el 0,96%.
El mayor número de compras durante estas últimas cinco jornadas se han concentrado sobre Puleva Biotech, que ha incrementado el precio de las acciones un 12,50% en el periodo. El fuerte empujón de la filial de Ebro Puleva se ha producido por la solicitud de dos patentes para dos nuevos productos que previenen enfermedades cardiovasculares y del sistema nervioso.
El lado más amargo lo puso Terra, que cayó un 8,89%. La reducción de gastos de Berteslmann sobre el portal financiero ha penalizado la cotización y se ha situado entre las peores tecnológicas en el periodo.
Castigo para las tecnológicas
La semana ha sido dura para los valores tecnológicos. Algunas compañías estadounidenses han comenzado a revisar a la baja las estimaciones de beneficios para este año, como Peoplesoft. Otras, como Adelphia, han reconocido que la SEC, el organismo regulador de Estados Unidos, está siendo investigada por irregularidad contable.
Para colmo, Goldman Sachs ha reconocido que la recuperación del gasto de las grandes compañías en software se traslada a 2003. Al mismo tiempo, los analistas comienzan a cambiar de opinión. Lehman Brothers rebajó la recomendación Vodafone.
Todo ello ha provocado de nuevo una oleada de ventas las compañías tecnológicas. En Europa se han dejado una media del 5,71%. El de medios de comunicación ha sido el segundo peor (-4,08%).