Disney de magia y cine
El gigante del ocio y el entretenimiento ha inaugurado en París un segundo parque dedicado a la imagen y los dibujos animados justo al lado del anterior, que ahora cumple 10 años
A la magia que envuelve el parque Disneyland de París se le ha unido ahora la vitalidad y la acción que desprenden el cine, la televisión y los efectos especiales. La factoría Disney, que inauguró el pasado fin de semana su segundo parque parisino justo al lado del anterior, ofrece una decena de nuevas atracciones en las que el visitante puede experimentar la sensación de pasar de 0 a 100 kilómetros por hora en 2,8 segundos, sentirse protagonista de una película, averiguar algunos de los trucos que esconde la gran pantalla, contemplar varios decorados de escenas famosas y conocer de cerca cómo se crea un personaje animado.
El Walt Disney Studios, nombre del nuevo parque, ofrece un recorrido completo por los entresijos del cine sin perder de vista a los personajes más emblemáticos de la casa: Mickey y Minnie Mouse, Pluto, Goofy y los Donald, que si bien tienen una presencia menos visible que en Disneyland, no dejan de recordar que se está en un mundo de fantasía.
Tras el Disney Village, una zona en la que se concentran tiendas, restaurantes y salas de cine, dos puertas invitan al visitante a adentrarse en los mundos paralelos, pero diferentes de la ilusión creativa. Por un lado, el primer parque, que ahora cumple 10 años, ofrece un amplio abanico de aventuras estructurado en cuatro ambientes: los paisajes de cañones y montañas para buscadores de oro, las islas tropicales del Caribe y la selva asiática pensada para los más atrevidos; los cuentos de hadas y las historias infantiles con el castillo de la Bella Durmiente del bosque en primer plano, y el desafío del futuro con viaje intergaláctico incluido.
El segundo parque también está dividido en cuatro zonas de producción distintos: Front Lot, que recrea escenarios cinematográficos al más puro estilo de Hollywood; Animation Courtyard, dedicada a los dibujos animados y al arte de dar vida a unos personajes creados sobre el papel (los más curiosos pueden probar sus habilidades en esta forma particular del arte); Production Courtyard, que incluye varias actividades en las que se descubren los secretos de las escenas del cine y la televisión, y Back Lot, un área dedicada a los efectos especiales, las grabaciones musicales y las maniobras arriesgadas.
En este conjunto de atracciones, el visitante se puede sumergir en un espectacular rodaje con terremoto incluido, deslizarse por una montaña rusa donde la música, los juegos de luces y el ritmo de los giros están perfectamente acompasados, o asistir a una película mágica que recrea 100 años de cine americano y europeo. Y es que los diseñadores del parque han puesto especial empeño en combinar las dos culturas de ambos lados del Atlántico; con ello demuestran su habilidad para superar el inicial rechazo francés a todo lo que sugería e implicaba el ratón Mickey.
De hecho, el presidente ejecutivo de la multinacional del ocio, Michael Eisner, quiso dejarlo claro en la presentación del parque el pasado día 15: 'Nos encanta el cine europeo; producimos películas en Francia que luego se distribuyen en EE UU y también hacemos espectáculos para la televisión francesa. Somos una empresa americana que honra el cine francés y europeo'. El objetivo del nuevo parque, en el que se han invertido 610 millones de euros, es que el público participe en las atracciones, que se involucre y se sienta como protagonista de una verdadera película. Así lo explicó el presidente y consejero delegado de Disneyland París, Jay Rasulo, el día anterior a la inauguración.
Cómo ir. Air France y Disneyland Resort ofrecen diversos paquetes con vuelos desde toda Europa. En tren, la línea A del RER va del centro de París (Chessy) hasta Marne-la-Vallée. Thalys tiene conexiones diarias desde Bruselas y Holanda.
Hoteles. Hay siete hoteles temáticos, aunque lo más práctico es comprar un paquete completo donde se incluye la entrada a los parques. Tres días y dos noches, incluido el precio del avión, en un hotel medio puede salir por 393 euros a los adultos y 244 a los niños (en habitación compartida). También hay ofertas especiales.
Entradas. El precio varía según el número de días. Tres jornadas en los dos parques cuesta 99 euros a los adultos y 80 a los niños.
Restaurantes. La oferta va desde un Planet Hollywood y un Rainforest Café hasta un McDonald's o un quiosco de perritos calientes.
Cómo ir. Air France y Disneyland Resort ofrecen diversos paquetes con vuelos desde toda Europa. En tren, la línea A del RER va del centro de París (Chessy) hasta Marne-la-Vallée. Thalys tiene conexiones diarias desde Bruselas y Holanda.
Hoteles. Hay siete hoteles temáticos, aunque lo más práctico es comprar un paquete completo donde se incluye la entrada a los parques. Tres días y dos noches, incluido el precio del avión, en un hotel medio puede salir por 393 euros a los adultos y 244 a los niños (en habitación compartida). También hay ofertas especiales.
Entradas. El precio varía según el número de días. Tres jornadas en los dos parques cuesta 99 euros a los adultos y 80 a los niños.
Restaurantes. La oferta va desde un Planet Hollywood y un Rainforest Café hasta un McDonald's o un quiosco de perritos calientes.