Dos ataques palestinos empañan la misión de paz de EE UU en Israel

La misión del enviado de Estados Unidos, Anthony Zinni, quedó ayer ensombrecida por nuevos brotes de violencia. Un palestino abrió fuego en la ciudad de Kfar Saba, cerca de Tel Aviv, matando a una mujer e hiriendo al menos a 15 personas antes de ser abatido por la policía, según las autoridades. Poco antes, un suicida palestino hirió a diez israelíes en el barrio de colonización judía de French Hill, en Jerusalén, cuando hizo estallar un artefacto explosivo que llevaba consigo al paso de un autobús. El movimiento integrista Yihad Islámica se responsabilizó del atentado.

Además, al menos un activista palestino murió en el distrito cisjordano de Belén, en los enfrentamientos que se registran entre soldados israelíes y palestinos.

Estos ataques se producen mientras se encuentra en el país la misión pacificadora de Zinni, que pretende alcanzar una tregua después de más de un año de violencia. El enviado estadounidense condenó los dos atentados que los activistas palestinos perpetraron en Israel y exhortó a la Autoridad Nacional Palestina a castigar a los responsables. 'Estos atentados no me desviarán de mis esfuerzos y seguiré trabajando con ambas partes para conseguir poner fin al conflicto palestino-israelí', dijo Zinni en un comunicado difundido.

Los palestinos han reiterado su condición de que, antes de llegar a una tregua con Israel, este país deberá replegarse de todos los territorios autónomos invadidos en las últimas semanas. El ministro israelí de exteriores, Simón Peres, anunció la disposición de su país de retirar las tropas sólo a cambio de garantía de seguridad.