_
_
_
_
Negocio del sexo

Las webs porno se hacen consultoras

Los sitios pornográficos descubren una fuente de ingresos asesorando a otras firmas sobre cómo hacer negocios en la Red

Las webs de pornografía son uno de los pocos negocios que dan dinero en Internet. Según el ultimo informe de Online Computer Library Center existen en estos momentos unos 80.000 sitios porno que el pasado año generaron unos beneficios de más de 1.140 millones de euros, una cifra que es la envidia de otros sectores de comercio electrónico. Este segmento figura también entre los más dinámicos e innovadores de la web y ha sido el mayor impulsor de las herramientas de pago, seguridad, suscripción, nuevos servicios de vídeo y sistemas interactivos. Además, el éxito de su modelo de gestión está sirviendo ahora de inspiración a otras puntocom de los ámbitos más diversos, que están llamando a la puerta de estas firmas, a las que muchas veces se mira con rechazo y desprecio moral, para pedir asesoramiento sobre la mejor forma de hacer negocio en la Red.

Uno de los ejemplos más curiosos de esta tendencia es el protagonizado por Danni Ashe, una ex bailarina de strip tease estadounidense que hace cinco años decidió abrir su propia web erótica con la ayuda, según explica ella misma, de un manual de lenguaje HTML y el libro Being Digital (Ser Digital) de Negroponte 'como inspiración'. Ahora Ashe, cuando no está posando desnuda en su web, se dedica a recorrer el mundo como consultora tecnológica y consejera de todo tipo de empresas.

La facturación prevista por Ashe de los negocios relacionados con su web para este ejercicio ascienden a nueve millones de euros. Y acaba de crear otra compañía llamada DHD Media que se dedicará a explotar sus negocios de consultoría, con los que espera obtener la mitad de sus ingresos en tres años.

La estrella porno ha desarrollado también su propia tecnología de vídeo en Internet, denominada DanniVision, que elimina la necesidad de usar el popular RealPlayer. El pasado año participó en actos como la Conferencia Mundial de Internet de Sydney y en el seminario Streaming Media Asia de Hong Kong. Asimismo, forma parte de varios comités de EE UU para la protección de menores en Internet. Su web cuenta con medidas de seguridad especiales para evitar el acceso de niños.

El aspecto de Danni Ashe, con su exuberante delantera y su leonina melena rubia, no encaja precisamente en la imagen de empresaria de una puntocom. Al principio, los ejecutivos de las firmas de comercio electrónico eran reacios a aceptarla en sus foros. Pero ahora hay una larga lista de compañías haciendo cola para recibir el asesoramiento de Ashe, que van desde webs de medicina a vinos y otros sitios porno que intentan imitar el éxito de su modelo de negocio.

Según afirma Dario Betti experto en comercio electrónico de la consultora Ovum, muchos sitios web para adultos han empezado a ofrecer servicios de consultoría. Lo que pone de relieve una vez más que la pornografía es el sector más exitoso de Internet. Betti explica que trucos utilizados por estas web como el manejo de las imágenes, el uso de películas cortas, los ganchos para que el usuario desee ver más, la seguridad y las herramientas personalizadas son algunos de los puntos fuertes de estos sitios que pueden ser explotados por otras firmas de comercio electrónico.

Pese a todo, el negocio de la pornografía en Internet no se ha librado de algún que otro contratiempo. Según la revista Wired, Playboy ha perdido 57 millones de euros en su división de Internet en los últimos dos años. Uno de los mayores problemas, aparte de la caída de la publicidad, lo está causando un puñado de entusiastas principiantes que se dedican a suministrar porno gratis en la Red.

Playboy está ahora luchando por mantener su hueco en el negocio web, en el que cuenta con rivales como Cybererotica y Sex.com. En los últimos meses ha comprado varias pequeñas webs y ahora está investigando nuevos materiales y formatos. Uno de los servicios que estudia lanzar es la distribución de fotografías en teléfonos móviles, como la de la chica del mes, aunque la firma tendrá que esperar para ello al lanzamiento de los móviles multimedia.

Los linces de este negocio ya se están frotando las manos con las posibilidades que traerá la telefonía de tercera generación para el sector. Algunos analistas han calculado que la demanda de servicios pornográficos a través de móviles puede estar valorada en 1.600 millones de euros en 2005 en el Reino Unido. Otros se atreven a decir que el futuro de la tercera generación depende del sexo.

Según Dario Betti, 'guste o no, la pornografía ha tenido hasta ahora una gran influencia en las tecnologías visuales que acaban adoptándose, y la telefonía multimedia no va a ser la excepción'.

A Betti no le falta razón, muchos de los dispositivos audiovisuales que rodean nuestra vida diaria tienen sus orígenes en decisiones de la industria del sexo. Por ejemplo, la cámara de vídeo frecuentemente utilizada para grabar entrañables escenas familiares, los primeros pasos del niño, la boda... lleva cintas VHS y no Betamax por las presiones de los pornógrafos de EE UU que allá por los setenta las consideraron más prácticas y baratas para su negocio.

La mano de la industria pornográfica está también detrás de muchos de los avances de la televisión interactiva, así como en la televisión de pago (satélite y digital) sobre todo en lo que se refiere al sistema de abono. Y ahora llega la telefonía multimedia. Según Malcom Hutty, responsable de la campaña contra la censura de Internet en el Reino Unido, 'los móviles de tercera generación permitirán a los usuarios estar conectados siempre a la Red; será como llevar la web en el bolsillo, y después de ver cuánta gente usa la Red para ver páginas porno, no hace falta ser un genio para imaginar lo que van a hacer con sus móviles'.

La industria del sexo y las operadoras de móviles se preparan para sacar negocio de una combinación que consideran será explosiva.

Ford da un ultimátum a sus empleados

 

La pornografía se vende bien siempre, pero sigue estando mal vista. La mayor parte de la gente que hace uso de estos servicios prefiere que nadie se entere. Y los últimos avances, como son el sistema DVD o Internet de banda ancha, permiten que los usuarios puedan acceder a los más novedosos productos desde la privacidad de sus casas sin tener que acudir a un cine cutre o a una sex shop.

 

 

 

 

 

 

 

Pero son muchos los que todavía siguen accediendo a pornografía utilizando la conexión de sus puestos de trabajo, incluso en compañías que ya disponen en sus sistemas de programas informáticos para el filtrado de este tipo de webs.

 

 

 

Esta semana el gigante automovilístico Ford advirtió en un mensaje de correo electrónico a sus empleados en el Reino Unido que disponían de un plazo de dos semanas para borrar todo el material pornográfico, como fotografías, enlaces a sitios porno y cualquier contenido que la firma considere ofensivo del disco duro de sus ordenadores.

 

 

 

En muchas ocasiones las fotografías pornográficas están ocultas en archivos que están adjuntados a mensajes de correo electrónico, por lo que son difícilmente detectables por el software de filtrado que tiene la compañía.

 

 

 

Pasadas las dos semanas de amnistía, Ford ha advertido que revisará periódicamente los ordenadores de sus empleados y si alguno es descubierto 'accediendo, transmitiendo o almacenando material ofensivo o inapropiado será sometido a una acción disciplinaria'.

 

 

 

Según portavoces de Ford, 'la iniciativa no responde a que haya ninguna evidencia de que los trabajadores estén haciendo un uso inadecuado de los sistemas informáticos'. El movimiento, que se ha realizado tras consultar con los sindicatos, 'es un recordatorio rutinario a los empleados sobre la actitud de tolerancia cero de Ford respecto al uso inadecuado de sus sistemas.

 

Archivado En

_
_