Las madereras europeas generan el 54% de la energía primaria de origen renovable
El aprovechamiento energético de la producción maderera es una actividad económica tan tradicional como oscura. Así lo admite la agrupación de cuatro organizaciones europeas dedicadas a fomentar las energías renovables que han unido sus fuerzas en el consorcio EurObserv'ER para desarrollar una serie de indicadores para las fuentes alternativas de energía. Su incursión en el campo de la biomasa reafirma la importancia del sector maderero de la Unión Europea.
En el conjunto de la UE, se calcula que la producción de energía primaria a partir de la combustión de madera representó 47,3 millones de toneladas equivalentes de petróleo en el año 2000. Ello supone, a su vez, el 54% del conjunto de la producción de energía primaria a partir de fuentes de energía renovables. La combustión de madera se considera una fuente de energía renovable porque, aunque durante este proceso se emite dióxido de carbono, se considera, sin embargo, que, en el supuesto de que las empresas actúen en un marco de explotación forestal sostenible, no contribuye a aumentar el llamado efecto invernadero en la atmósfera.
De hecho, a efectos de las autoridades medioambientales europeas, se calcula que la quema de cuatro metros cúbicos de madera evita la emisión de 2,5 toneladas de dióxido de carbono.
'Todos los países europeos con mayor peso dentro del sector de aprovechamiento energético de la madera han establecido planes de fomento para impulsar su desarrollo', afirma un reciente informe de EurObserv'ER sobre el sector, titulado The 2001 Wood Energy Barometer ('El barómetro 2001 de la energía procedente de la combustión de la madera'), que se ha financiado con fondos europeos del programa Alterner.
Esfuerzo europeo
El informe destaca los esfuerzos a este respecto de Dinamarca, Finlandia, Alemania, Francia y España, que, a través del Plan de Fomento de las Energías Renovables, se han propuesto triplicar en ocho años la actual producción de energía primaria a partir de biomasa, hasta 9,8 millones de toneladas equivalentes de petróleo.
Según este barómetro, España sería el sexto mercado maderero más importante de la UE, si bien, la producción energética que se le atribuye de 3,6 millones de toneladas equivalentes de petróleo corresponde, en realidad, a la producción total de energía que se genera en España a partir de biomasa. Bajo este concepto se incluyen tanto los residuos forestales derivados de la poda, los restos de la producción agrícola e, incluso, de la actividad de los aserraderos y de los fabricantes de muebles, pero también otros residuos de origen no vegetal, como lodos de depuradoras, desperdicios de origen animal y basura en general.
En España, casi toda la biomasa se aprovecha para usos térmicos, mientras que apenas se utiliza para generar electricidad (169.000 toneladas equivalentes de petróleo), situación que se propone subsanar el actual Plan de Fomento. En Europa, el 85% de la madera que se destina a la combustión se dedica a producir energía térmica.
El barómetro de EurObserv'ER concluye que Finlandia, aunque figura como tercer productor europeo, tiene 'una industria bien desarrollada, que satisface el 50% de las necesidades energéticas del país'. Entre las compañías europeas más grandes figura, precisamente, la finlandesa Kvaerner Pulping, que, además, es uno de los principales fabricantes de cogeneradores industriales de alta tecnología.
La radiografía del sector en este país, de sólo 5,1 millones de habitantes, refleja la realidad de la industria europea del aprovechamiento energético de la madera: en Finlandia se cuentan hasta 55 pequeñas compañías y sólo existen cinco grandes productores con plantas térmicas.