BBVA, neutral
Durante el presente ejercicio, la entidad española ha concluido su proceso de integración iniciado el 19 de octubre de 1999 cuando se anunció la fusión del antiguo Banco Bilbao Vizcaya (BBV) y Argentaria. El plan estratégico de la compañía se concreto en el proyecto CREA, en el cual se definían las líneas estratégicas de gestión del Grupo en cada una de las áreas de negocio. Aunque quedó inicialmente definido para el periodo 2000-2002, la dificultad de cumplimiento de los objetivos, sobre todo en términos de beneficios, llevó al grupo a adelantar la conclusión del proyecto a diciembre de 2001 y anunciar nuevas metas en 2002, manteniendo las líneas estratégicas. A finales del 2001, tras la salida de Emilio Ybarra y Pedro Luis Uriarte de la entidad, se procedió a llevar a cabo una reestructuración interna con el fin de agilizar la estructura organizativa. El negocio quedó dividido en seis grandes áreas con 41 unidades de negocio.
La crisis de Argentina puede representar un freno a su apuesta por su expansión en Latinoamérica, que se ha reflejado positivamente en los resultados del grupo, sobre todo a partir de la consolidación de Bancomer (el beneficio obtenido por la entidad mejicana representa el 59% del total del área de Latinoamérica). La situación que atraviesa el país austral ha llevado al grupo a destinar 1.354 millones de euros al saneamiento de su riesgo en dicho país, derivado de la participación en el Banco Francés.
En relación a este tema, el presidente del BBVA Francisco González, condicionó la permanencia en Argentina a que se adopten soluciones realistas, equitativas, equilibradas y ortodoxas, no obstante, mantuvo que si la situación se hace insostenible, el grupo se replantearía su inversión en el país, aunque de momento no se contempla ese escenario. De cara al futuro, la vocación del grupo es protagonizar una operación de concentración del sector financiero en Europa. En esta línea, BBVA acaba de reforzar su presencia en Italia al elevar del 10 al 14,9% su participación en Banca Nazionale de Lavoro (BNL).
La entidad se ha marcado como objetivo para 2002 un crecimiento del BPA del 10%. Además BBVA quiere aumentar su cuota de mercado en España, mejorando la calidad del servicio y ampliando su oferta de productos. El banco espera lograr dicho objetivo a pesar de que tiene previsto continuar con la racionalización de la red, cerrando entre 340 y 350 oficinas y abriendo 115 en lugares estratégicos. Otra de las metas para este año es alcanzar un ROE (rentabilidad sobre recursos propios) superior al 19% y mejorar la eficiencia en dos puntos hasta el 48%, así como crecer de forma no orgánica, fundamentalmente en Europa.
Resultados del cuarto trimestre de 2001
El grupo BBVA ha obtenido un beneficio neto de 2.363 millones de euros lo que representa un incremento de un 5,9% con respecto al 2000, cifra que se sitúa muy por debajo del 16% que la entidad fijó el pasado mes de septiembre (anteriormente se previa un incremento del 24%). Los elevados saneamientos realizados han sido posibles gracias al buen comportamiento de la parte alta de la cuenta de resultados, con todos los márgenes del negocio recurrente creciendo igual o por encima del 20% en el año. La crisis en Argentina ha hecho necesarios saneamientos totales por importe de 1.354 millones de euros, cuyo efecto a nivel de beneficio atribuido se sitúa en 743 millones de euros.
En cuanto a la evolución de los márgenes de negocio, destaca el buen comportamiento de la parte alta de la tabla. El margen financiero se incrementa un 26,2% hasta los 8.824 millones de euros, destacando el mantenimiento de spread de clientes en niveles similares al del trimestre anterior. En cuanto a volúmenes, como consecuencia del fin de la integración a principios de 2001, en la segunda parte del año BBVA registró un aumento de su negocio en España, con una creciente recuperación de la actividad crediticia y de la captación de clientes. Durante el conjunto del ejercicio 2001, el crédito sobre clientes creció un 9,3% y los recursos totales gestionados aumentaron un 6,4%. El margen ordinario, que aumenta un 19,8% Vs. 25,8% 9M01, acusa la desaceleración en comisiones y el pésimo comportamiento de los resultados por operaciones financieras que caen un 37,1%. Este resultado se produce como consecuencia de las operaciones extraordinarias realizadas durante el año 2000.
El efectivo control de costes permitió un aumento del 27,9% en el margen de explotación que creció hasta los 5.599 millones de euros. Sin contabilizar el resultado de operaciones financieras, el crecimiento del margen de explotación hubiera sido del 42%. Como consecuencia del control de costes, el grupo consiguió mejorar su ratio de eficiencia al rebajar el ratio del 53,3% en diciembre de 2000 al 50,4% al cierre del pasado ejercicio. En BBVA la eficiencia ha mejorado del 57,5% al 51,4% y en BBVA sin América del 45% al 44%.