Aumenta la espiral de muerte y venganza en Oriente Próximo
La espiral de violencia entre israelíes y palestinos siguió en aumento ayer, jornada en la que murieron al menos 12 palestinos y seis israelíes.
Las víctimas palestinas se produjeron en ataques realizados por el Ejército israelí para vengar la muerte el lunes de tres colonos judíos y un soldado en dos atentados de extremistas islámicos.
Los bombardeos israelíes empezaron de madrugada y se prolongaron hasta primera hora de la tarde, cuando un helicóptero destruyó una oficina del grupo islámico Hamas y alcanzó un colegio cercano. Dos militantes del grupo integrista murieron en el ataque y al menos seis niños resultaron heridos, uno de ellos de gravedad.
El ataque tuvo lugar en el campo de refugiados de Jabalya, en la franja de Gaza, donde residen 90.000 palestinos. El Gobierno de Tel Aviv justificó el ataque como una respuesta ¢a la reciente ola de criminales ataques de terror¢ contra la población israelí.
Mahmoud al-Zahar, uno de los líderes políticos de Hamas, calificó ayer de ¢crimen¢ el ataque israelí y prometió una venganza inminente. Y ésta no se hizo esperar. Horas después, un grupo de palestinos armados mataba a seis israelíes en un ataque contra un punto de inspección del ejército en Cisjordania. Los israelíes fueron emboscados en Ein Ariq, al noroeste de Ramala. Además, al menos otro israelí resultó herido.
Previamente, otro palestino murió en un atentado suicida. El terrorista trató de acceder a un autobús de civiles a las puertas del asentamiento judío de Mehola (Cisjordania). Pero el conductor sospechó de él y aceleró lo suficiente para evitar que la explosión del artefacto que el palestino ocultaba en sus ropas alcanzase a los viajeros.
El ataque palestino provocará seguramente una fuerte represalia israelí, en la continuación de una espiral de muerte y venganza que ha costado la vida a 22 personas en apenas 24 horas.
El ministro de Exteriores israelí, Simon Peres, decidió aplazar la visita de dos días a España que tenía previsto iniciar hoy.