La locomotora de los mercados europeos
Los analistas confían en que la Bolsa alemana recupere el atractivo y el prestigio y esperan una revalorización del 9% en el Dax este año
La Bolsa alemana vivió el pasado año uno de sus peores ejercicios. El Dax, su principal índice, perdió un 29,37%, frente al 18,6% que se dejó el índice FTSE 100 de Londres o el 26,2% del Mib-30 italiano. Durante 2001, la economía alemana pasó de ser la locomotora de Europa a convertirse en el furgón de cola, con un crecimiento del producto interior bruto de tan sólo el 0,6%.
Este país ha acusado más que otros la crisis estadounidense y los efectos de los atentados terroristas del 11 de septiembre, ya que un 10% de sus exportaciones van a parar a EE UU. Casi todas las grandes empresas alemanas vieron reducirse sus beneficios y la caída de las ganancias obligó a reducir alrededor de 130.000 puestos de trabajo. Todo ello se trasladó al panorama bursátil, donde algunos sectores como el tecnológico o el financiero resultaron especialmente afectados. En estos sectores se encuentran las compañías con mayor peso dentro del Dax, como el grupo de telecomunicaciones Deutsche Telekom, que representa un 9,6% del índice, la aseguradora Allianz, con un 9,41%, o Siemens, con un 8,5%.
Pero, sin duda alguna, el Neuer Markt, primer mercado de Europa para nuevas tecnologías, fue el más castigado el pasado año por la crisis y la bajada de beneficios y padeció, además, la desaparición de muchas de sus empresas. Así, el Nemax 50, su principal índice, pasó de un máximo histórico de 9.603 puntos el 10 de marzo de 2000 a desplomarse hasta los 680,8 puntos el 21 de septiembre de 2001.
Los expertos no creen que se repita en 2002 este annus horribilis y esperan que el segundo mercado de Europa vuelva a recuperar el atractivo para los inversores y su prestigio internacional. No en vano, el parqué alemán es uno de los más abiertos al exterior, con una presencia de inversores extranjeros de más del 50%, según la Deutsche Börse, la sociedad de la Bolsa alemana.
Las previsiones del Gobierno apuntan a que la economía crecerá este ejercicio sólo un 0,75%, pero se mira con optimismo las esperanzadoras señales que llegan desde el otro lado del Atlántico. Un incentivo para los mercados será también la reforma del sistema de pensiones en Alemania, que fomenta un aumento de la inversión en fondos.
La ansiada recuperación llegará en un año en que Alemania vivirá elecciones generales, concretamente en septiembre. Los expertos alemanes no esperan que los comicios tengan una gran repercusión sobre la Bolsa. 'Más que quién gane, lo importante será con qué mayoría lo haga', opina Mark Neis, del banco germano Dresdner Bank. El resultado podría ser muy ajustado y arrojar alguna sorpresa, ya que los primeros sondeos dan una ligerísima ventaja a Edmund Stoiber, candidato conservador, sobre el canciller Gerhard Schröder, muy criticado por su pasividad ante la crisis económica.
Pese a las esperanzas existentes, los expertos mantienen la cautela y no ven una clara recuperación hasta la segunda mitad del año. Los analistas del banco alemán WestLB aseguran que son 'moderadamente optimistas' sobre la evolución de la Bolsa en 2002. 'No esperamos que la coyuntura económica cambie mucho, aunque mejoran las perspectivas para la segunda mitad del año', dicen. Estos expertos esperan una revalorización del índice Dax de alrededor del 9%, lo que situaría a este indicador a finales de 2002 en los 5.300 puntos. Para estos expertos, las acciones más recomendables son las de bancos y aseguradoras 'que están claramente infravaloradas y tenderán a subir'. Como los tecnológicos. Estos títulos sufrieron también fuertes descensos el pasado año, especialmente tras los atentados de Nueva York y Washington.
La aseguradora Allianz, por ejemplo, ha perdido alrededor de un 30,5% de su valor en Bolsa, mientras que Deutsche Bank, el primer banco de Europa, se ha dejado un 16,5%. La prevista recuperación de la Bolsa traerá consigo un aumento de las ganancias de la banca gracias a la compraventa de acciones, uno de los negocios más lucrativos del sector bancario. En cuanto a las aseguradoras, los analistas esperan un fuerte impulso gracias a la reforma de las pensiones, que propiciará un aumento de la contratación de seguros de vida.
En Commerzbank Securities apuestan más por el sector industrial aunque, eso sí, sólo a partir de la segunda mitad del año. Rolf Algeti, analista de este banco alemán, afirma que a partir de junio se incrementará la producción, lo que beneficiará a compañías como el fabricante de vehículos industriales MAN, la química Linde, o el consorcio industrial ThyssenKrupp. Para este experto, la entrada de las monedas y billetes de euro este año beneficiarán al consumo y al comercio al por menor, lo que repercutirá en una subida de las acciones de compañías como la cadena de grandes almacenes KardstadtQuelle. Una opinión similar tiene Mark Neis, del Dresdner Bank, que señala que este banco está recomendando a sus clientes concentrarse en valores defensivos hasta la mitad del año, y pasar después a títulos cíclicos.
Nuevas emisiones
La difícil situación del mercado el pasado año frustró la salida a Bolsa de varias compañías, que prefirieron esperar a momentos más favorables. Aun así, 10 compañías en el mercado principal y 11 en el Neuer Markt se decidieron a empezar a cotizar en el parqué. La persistente debilidad de la Bolsa ha hecho que algunas firmas que tenían previsto lanzar una oferta pública de venta a principios de este año decidieran posponer la decisión.
El caso más sonado y reciente es el de la empresa española de artículos eróticos Private Media, que tan sólo un día antes de su salida al Neuer Markt anunció que retrasaba su estreno en Bolsa por las precarias condiciones del mercado. Una decisión semejante fue la tomada por Energie Baden-Württemberg (EnBW), accionista mayoritaria de la eléctrica asturiana Hidrocantábrico, que tenía previsto para mayo el inicio de su cotización en el parqué.
Para los expertos de WestLB la situación mejorará y afirman que 'no habrá peligro este año para las nuevas emisiones'. Una de las salidas a Bolsa más esperadas este ejercicio es la de T-Mobile, filial de telefonía móvil de Deutsche Telekom. Aunque se pospuso varias veces, los expertos creen que se producirá por fin en los próximos seis o nueve meses. Para Mark Neis, no hay duda de que tendrá lugar en breve, porque 'Deutsche Telekom necesita liquidez'. El grupo de telecomunicaciones tendrá que afrontar este año la preparación del lanzamiento al mercado de la nueva telefonía móvil de tecnología UMTS. Deutsche Telekom tiene previsto centrarse este año en los servicios de telefonía móvil y elevar la cuota de participación de este sector en la facturación de la compañía hasta el 40%. Sin embargo, no podrá empezar a ofrecer servicios de telefonía móvil UMTS en Alemania hasta 2003, frente a su competidor Vodafone, que empezará a prestarlos en este mismo año. Esta circunstancia podría enturbiar sus perspectivas en Bolsa. Para Neis, la actual situación del mercado 'no es nada fácil' para T-Mobile. La debilidad de las Bolsas ha castigado con especial virulencia a las tecnológicas y su casa matriz, Deutsche Telekom, ha perdido durante el año alrededor de un 55% de su valor. En WestLB son, sin embargo, optimistas y consideran que la salida a Bolsa de T-Mobile 'será todo un éxito'.