Tenaria amplía capital para cubrir la 'deserción' de los minoritarios
El consejo de administración de Tenaria, la operadora de cable que integra las antiguas Retena y Reterioja, decidió ayer recurrir a una ampliación de capital por 16,5 millones de euros para salvar el plan estratégico de la empresa, tras la decisión de los pequeños accionistas de no cubrir su parte en la ampliación aprobada en octubre. Esto ha motivado que ayer se anunciara una reducción del 25% del capital que se efectuará previamente a la actual ampliación.
La empresa no ha concretado la parte de capital que no fue cubierta en la ampliación de 14,6 millones de euros celebrada en octubre y que será sufragada por la nueva operación acordada ayer, que se efectuará de inmediato mediante la emisión de 2.200.000 acciones por un valor nominal individual de 7,5 euros.
El retraso en la obtención de beneficios, tras haber efectuado un desembolso de 60,1 millones de euros (10.000 millones de pesetas) en los últimos cuatro años, provocó que la Sociedad para el Desarrollo de Navarra (Sodena) y la también pública Agencia para el Desarrollo Económico de La Rioja (Ader), con el respaldo de Caja Navarra, debieran emplearse a fondo para cubrir la deserción de los pequeños accionistas. La operadora había realizado inmediatamente antes, en septiembre, otra ampliación de capital, por importe de 15 millones de euros.
Tenaria está participada por Caja Navarra, Auna, Empruni, la sociedad navarra La Información, las empresas públicas Sodena y Ader (dependientes, respectivamente, de los Gobiernos de Navarra y La Rioja), Participaciones Industriales Tena, Cementos Portland, el grupo Esteban Lizárraga y un grupo de accionistas riojanos (Vigas Mazo, Zaldívar Valores, Saglei, Radio Rioja y Usaya). Tras la última ampliación, Caja Navarra, Sodena y Auna controlan la mayoría del capital.
La negociación con Ono
Las apetencias de los minoritarios estuvieron a punto de ser generosamente cubiertas cuando el grupo Ono se mostró dispuesto, a principios de 2001, a hacerse con la propiedad de Tenaria por un precio de 70 millones de euros.
Sin embargo, la persistencia de la crisis de las empresas tecnológicas, provocó que el comprador rebajara posteriormente, y de forma unilateral, la valoración inicialmente fijada, lo que motivó la ruptura de las negociaciones. Tenaria se vio entonces obligada a reconsiderar su proyecto. Para afrontar su futuro en solitario, Tenaria fichó a principios del pasado verano a José Luis Soria Grau, quien ocupó durante tres meses el cargo de consejero delegado y diseñó un ambicioso plan, que contemplaba pasar de los 48.893 hogares cableados a finales de 2001 a 139.600 en 2003 y 210.000 en 2005. Para ello, se exigía el esfuerzo inversor mencionado. Los resultados de la ampliación de capital celebrada en octubre han provocado la iniciativa anunciada ayer.
En la reunión, el consejo de administración afrontó también la renovación de la cúpula directiva, iniciada con la salida de Soria Grau y ampliada ayer con la renuncia presentada por el hasta ahora presidente de Tenaria y ex consejero de Economía del Gobierno Foral, José María Aracama. Pieza clave en el apoyo a los sucesivos relanzamientos exigidos por la operadora, Aracama resistió las solicitudes para su continuidad, alegando que la presidencia de Sodena requiere todo su tiempo.
Los huecos en la cúpula directiva serán cubiertos por una nueva figura, la del vicepresidente ejecutivo, que fue propuesta por la representación de la Corporación CAN (Caja Navarra). Este cargo será cubierto por el grupo La Información, editor del Diario de Navarra, mientras la designación de quién asumirá la dirección general de la sociedad se espera antes de que concluya este mes.
Desde el pasado octubre, Tenaria ha duplicado la media de contratos vendidos al mes. Paralelamente, la compañía ha incrementado un 34% la cifra de clientes. Esta evolución parece corroborar la afirmación de Soria Grau en la presentación del plan, el pasado verano, cuando, a pesar de las urgencias de los pequeños accionistas por los beneficios, afirmó rotundamente que 'una pyme tiene futuro en el mundo del cable'.