El ICAC obliga a las empresas a valorar el peso argentino entre 1,5 y 1,7 por dólar
La norma supone en la práctica contabilizar los pesos a un cambio entre 1,50 y 1,70 por dólar, en vez de la paridad vigente durante todo el año pasado. Los analistas señalan que ese criterio ya estaba siendo aplicado por los bancos y por las grandes compañías que preparan la presentación de sus resultados del año pasado.
La nota del ICAC emitida ayer pone fin a la incertidumbre generada por la crisis argentina en las empresas que deben cerrar sus cuentas anuales y presentarlas, en el caso de las cotizadas, con la fecha límite del próximo 1 de marzo. El pronunciamiento, que se esperaba para la semana pasada, se retrasó hasta ayer debido a la complejidad del caso, sometido a consulta del organismo del Ministerio de Economía por varias compañías.
En la nota informativa, el ICAC recordó que el tipo de cambio de una divisa al cierre del ejercicio es el ¢parámetro necesario para medir los elementos patrimoniales expresados en una moneda distinta al euro¢. Al no existir una cotización del peso argentino el 31 de diciembre de 2001, porque se declaró la emergencia económica y quedó paralizada toda actividad financiera, el criterio del ICAC establece que ¢el tipo de cambio que debe operar a los efectos de la normativa contable indicada es el que se obtenga en el cierre del primer día de cotización de la moneda argentina producido después de la devaluación que se aprobó legalmente en aquel país¢. Asimismo, continúa el ICAC, ¢en la valoración de ciertos activos, en cuanto a su solvencia y recuperabilidad, será necesario tener en cuenta la situación descrita¢.
Devaluación y resultados
Tras mantener durante 11 años la paridad entre dólar y peso, Argentina suspendió el pago de la deuda el 23 de diciembre de 2001, pero no anunció la devaluación del peso hasta el 5 de enero y no la aprobó en el Parlamento hasta el 7. La divisa cotizó en el mercado libre el viernes 11 de enero, fecha que según el ICAC se convierte en la referencia. En esa jornada se fijó un cambio de 1,5 pesos por dólar para la compra y 1,7 para la venta.
El instituto español de cuentas no hace ninguna referencia al cambio oficial del peso, fijado por el Gobierno en 1,4 por dólar, que debe aplicar la banca en ese país al convertir los depósitos. En el mercado libre, el peso siempre cotizó notablemente por encima de esa cifra, hasta superar los dos pesos por dólar, y en el mercado de futuros se apuesta por cambios de hasta cuatro pesos por dólar.
Aunque el ICAC deja claro que el cambio del 11 de enero es el aplicable al cierre de 2001, y no el oficial, en la nota no se cita expresamente el número de esa conversión, lo que, según fuentes del organismo, deja cierta flexibilidad a las compañías a la hora de aplicar el cambio de vendedor (1,5) o el de comprador (1,7) a sus activos en Argentina.
Analistas y profesionales de la auditoría consultados destacaron que el criterio del ICAC responde a lo esperado y que las empresas ya trabajaban en el supuesto más conservador dentro esa banda, es decir, aplicando un cambio de 1,7 pesos por dólar a sus cuentas de 2001. De esta forma se genera una minusvalía directa. ¢Se ha adelantado un trimestre gran parte del desajuste¢, resume Jesús Sánchez Quiñones, director de Renta 4.
Los bancos Santander Central Hispano y Bilbao Vizcaya Argentaria ya aplicaron esa cotización de 1,7 pesos por dólar (1,498 pesos por euro) al calcular el impacto patrimonial en sus cuentas de 2001, ya presentadas. Los analistas destacan que los dos bancos ya han provisionado el 100% de su inversión y fondo de comercio en Argentina, lo que equivale a darle valor cero.
De las grandes empresas españolas, Repsol YPF será la más afectada por el criterio del ICAC, ya que tiene un 45% de sus activos en Argentina. Fuentes de la compañía destacan, no obstante, que tres cuartas partes de esos activos, todos los de exploración y producción, están nominados en dólares. Sólo el negocio de distribución se encuentra en pesos. Los resultados de la petrolera no se conocerán hasta el 26 de febrero.
Otras empresas presentes en Argentina analizaban anoche la resolución del ICAC por si obligara a realizar ajustes en sus cuentas de 2001. La revisión a la baja de los activos y de los ingresos anuales en euros despierta incertidumbre.
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Duhalde decide no abrir el mercado de cambios
El Gobierno y el Banco Central de Argentina decidieron anoche extender hasta el jueves el cierre del mercado de cambios, iniciado el lunes, para evitar una fuerte subida en la cotización del dólar respecto del peso argentino.
Sin embargo, fuentes oficiales y de los bancos dijeron que las entidades sí abrirían sus puertas al público, aunque la retirada de dinero se limita a 1.500 pesos en salarios y 1.200 en cuentas corrientes.
Mientras tanto, los técnicos del Banco Central trabajan en la elaboración de nuevas normas entre las cuales se contempla una que impondría un tope para la compra de dólares en las casas de cambio. Una vez que los bancos reanuden su actividad, no podrán vender dólares al público, de acuerdo con lo dispuesto por el Ministerio de Economía el domingo por la noche.
La cautela y el cuidado gubernamental se explica ante el temor que la divisa estadounidense se dispare y ponga en jaque la instrumentación del nuevo plan económico.
El Gobierno siente que ha recuperado la iniciativa tras el diseño del programa, ya que ha recibido un apoyo decidido de Washington y Bruselas, así como de Madrid.
Ayer, la Comisión Europea dijo ¢que hay una serie de elementos muy alentadores¢ en las medidas anunciadas para sanear el sistema financiero y reactivar la economía argentina. En el mismo sentido opinó el presidente del Gobierno español, José María Aznar, quien consideró que el plan económico ¢va en la buena dirección¢.
En una clara señal para EEUU y el FMI, el Gobierno de Duhalde envió ayer su proyecto de Presupuesto al Congreso. Se espera una rápida aprobación de la ley, pues la mayoría de los legisladores apoyan a la Administración.
A pesar de que el FMI le ha manifestado al ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, que no cree probable que el país logre el objetivo de un déficit fiscal de 3.000 millones de pesos (unos 1.700 millones de euros) en 2002, el presidente Duhalde se siente firme.
Militares y Economía
¢Soy el presidente que más poder ha concentrado en los últimos 25 años porque soy el presidente de la concertación¢, dijo ayer. La afirmación fue posterior a la reunión que sostuvo la noche del lunes con la cúpula de las Fuerzas Armadas. Los comandantes en jefe de los tres ejércitos dieron su total respaldo al presidente y declararon su compromiso con ¢la defensa del orden constitucional¢.
El encuentro adquiere particular interés en momentos en que el propio presidente advierte sobre los peligros que corre Argentina de caer ¢en la anarquía y el caos¢. El periódico Financial Times publicó ayer un artículo, titulado Al borde del abismo, en el que llama la atención sobre la movilización de la clase media y los desocupados y el peligro, a su juicio, que esto entraña para el sistema político. Otros observadores locales también insisten en la necesidad de ¢restaurar el orden¢ como única vía para hacer viable el plan económico de pesificación de deudas y depósitos. Una fuente vinculada al ministro de Defensa, Horacio Juantorena, precisó que ¢la colaboración de las Fuerzas Armadas no tiene nada que ver con involucrarlas en la represión de conflictos sociales¢.
Fruto de las restricciones financieras impuestas por el Gobierno y por la incertidumbre que ha invadido a los consumidores a partir de la devaluación es la virtual parálisis del sector del automóvil. El índice de producción cayó un 65,7% en enero en relación con el mismo mes del año anterior, al tiempo que la venta de vehículos ha bajado un 80,8%.
En este ambiente de penuria que vive el país, las autoridades pesqueras anunciaron ayer la aprobación de proyectos para agregar 30 buques a la flota autorizada para pescar calamar en aguas del país, con lo que ésta contará con 80 barcos. Esto permitirá, según las autoridades, ¢una explotación del recurso dentro de los rangos aceptables de sustentabilidad¢.
Por otra parte, el presidente anunció ayer que habrá elecciones generales el 14 de septiembre de 2003. También habrá una profunda reforma política. Mientras el PIB cae a un ritmo del 8% en el primer trimestre de este año y el humor popular empeora, Duhalde intenta un consenso social del que todavía carece.