Solana aplicará a Coca-Cola el informe que impidió la fusión con Schweppes
El Tribunal de Defensa de la Competencia tendrá muy en cuenta el informe que realizó en 1999 para oponerse a la compra en España del grupo Schweppes por Coca-Cola en el caso de que tenga que dictaminar sobre la denuncia de Pepsi Cola contra su principal competidor por un presunto abuso de posición dominante. Este informe se mantiene todavía oficialmente en secreto, ya que Coca-Cola finalmente desistió de llevar a cabo la operación y el tribunal optó por no hacerlo público.
El informe elaborado en 1999 por el Tribunal de Defensa de la Competencia, entonces presidido por Amadeo Petitbó, recomendaba al Gobierno que se opusiera a la compra de Schweppes por Coca-Cola, por los negativos efectos que tendría para la competencia en el sector de las bebidas refrescantes.
Ahora, a los efectos de la denuncia de Pepsi Cola contra Coca-Cola, la importancia de ese informe estriba en que el Tribunal de Defensa de la Competencia dejó sentado un claro precedente sobre cuál es el mercado relevante en el que desenvuelven su negocio estas compañías. El tribunal consideró entonces que este mercado se circunscribía únicamente al de las bebidas refrescantes con gas, sin atender otras categorías de refrescos y ni siquiera productos teóricamente competidores de las bebidas refrescantes.
Esta tesis es justo la que defienden Pepsi Cola y Schweppes en las demandas que han presentado contra Coca-Cola para denunciar la posición de dominio que ejerce su competidor en el mercado y la que le permite establecer prácticas de abuso comercial, mediante contratos de exclusiva o de colaboración publicitaria.
Y precisamente es la que reiteradamente ha rechazado Coca-Cola, por considerar que el mercado relevante debería incluir, además de los llamados refrescos con gas, otras categorías de bebidas, y cita entre ellos refrescos sin gas y zumos, en donde su posición de mercado es mucho más débil
Trabajo adelantado
El Tribunal de la Competencia estima que con ese informe ya redactado tiene ya mucho trabajo adelantado en el caso de que, como todo parece apuntar, el Servicio de Defensa de la Competencia elabore finalmente un pliego de hechos y le remita el caso para que lo estudie y en su caso absuelva o condene a la compañía y a sus embotelladores en España.
Aun así, reconoce que, dado el tiempo que ha transcurrido desde que se realizó el informe, ¢nos servirá desde el punto de vista técnico, pero estamos obligados a revisarlo porque las condiciones del mercado van cambiando a medida que pasa el tiempo¢.
El tribunal presidido por Gonzalo Solana defiende el mantenimiento de la privacidad con la que hasta ahora se ha mantenido este documento, debido a que Coca-Cola finalmente desistió de comprar Schweppes. Y porque consideró que no era bueno para la competencia en el sector el que este dictamen se conociese, ya que había un claro riesgo de que se utilizara la información con fines comerciales.
Antes de tener que entrar en el fondo de la cuestión de la denuncia de Pepsi Cola y Schweppes contra Coca-Cola, el Tribunal de Defensa de la Competencia deberá decidir sobre un recurso remitido por Coca-Cola para que decida si debe o no entregar una serie de documentos que le exige el Servicio de Defensa de la Competencia y que Coca-Cola entiende que no debe facilitar porque se encuentran protegidos por el secreto de la comunicación abogado-cliente.
Respuesta rápida
El tribunal asegura que en pocos días tendrá lista su respuesta a Coca-Cola sobre este conflicto de interpretación jurídica. Fuentes del mercado aseguran que ante la negativa de Coca-Cola a entregar los papeles exigidos, el Servicio encargó a la abogacía del Estado un informe para conocer si tenía amparo legal para insistir en su petición.
¢La rotundidad con la que el abogado del Estado ratificó la legalidad del Servicio de Defensa de la Competencia, determinó que ésta entidad, dependiente del Ministerio de Economía, exigiera a Coca-Cola que entregará esa comunicación en un plazo de 10 días¢, añaden las fuentes consultadas.
Ahora el proceso está detenido a la espera de que el tribunal decida sobre la cuestión. A este respecto Coca-Cola declinó ¢hacer ninguna declaración por respeto al Tribunal de Defensa de la Competencia, que ya se está ocupando del caso¢.