Microsoft facturó 239 millones en España, un 14% más
Microsoft Ibérica facturó 239,1 millones de euros (39.782 millones de pesetas) en 2001, lo que supone un incremento del 14% respecto al ejercicio anterior. El consejero delegado de la filial española, Francisco Román, afirmó que este resultado 'ha sido bueno, aunque menor de lo que deseábamos', y subrayó que se ha debido a la expansión de los servidores .Net -que Microsoft comercializa para las empresas- y por el lanzamiento del sistema operativo Windows XP en octubre.
Román puntualizó que las ventas de estos servidores aumentaron un 58%. Respecto al Windows XP, se han vendido cerca de 340.000 ordenadores personales con este sistema operativo preinstalado.
El primer ejecutivo de la firma española destacó que, 'a pesar del delicado momento económico, Microsoft ha seguido creciendo', más en el segundo semestre (un 18% por facturación) que en el primero (10%) y 'especialmente en el último trimestre'. Atribuyó este comportamiento a que, en esta situación, 'las empresas cuidan mucho más sus inversiones y apuestan por los sistemas más fiables'.
Se refirió también a la evolución de MSN, la plataforma de Microsoft en Internet, que el año pasado alcanzó la cifra de 6,5 millones de usuarios únicos. La firma de medición de audiencias en la Red Mediametrix sitúa a MSN por delante de Terra y Yahoo. La compañía cerró el año con 2,3 millones de cuentas de correo electrónico adscritos a Hotmail, mientras que 1,5 millones de usuarios se han suscrito al servicio de mensajería instantánea MSN Messenger.
Prioridades en I+D
Román afirmó que hoy por hoy, 'Microsoft está entre las tres o cinco compañías que más invierten en investigación y desarrollo (I+D) del mundo' y que su inversión anual (5.940 millones de euros o 988.300 millones de pesetas) es 'equiparable a la de IBM'
Pero a partir de este año las prioridades de esta inversión han cambiado. Si hasta ahora la compañía se había volcado en el desarrollo de tecnología para los servidores, en los próximos meses centrará su estrategia en la expansión de sus servicios para grandes corporaciones (servicios a los que llama de 'misión crítica') y para dotar de la máxima seguridad a sus sistemas.