Duhalde dice que estaría en los piquetes si no fuese el presidente
El presidente de Argentina, Eduardo Duhalde, dijo ayer que piensa 'igual' que los miles de manifestantes que están protagonizando airadas protestas en su país y que, si no fuese el máximo responsable de su Gobierno, 'quizás estaría en un piquete o con una cacerola'.
Duhalde hizo así otro alarde de populismo, en un momento en el que prepara el terreno para presentar el plan económico con el que espera convencer al Fondo Monetario Internacional (FMI) para que entregue nuevos créditos a su país.
El Gobierno argentino pretende utilizar parte de los créditos del Fondo para fortalecer sus reservas en divisas y liberar la cotización del dólar, según explicó ayer el viceministro de Economía, Jorge Todesca.
Además, negó que piensen emitir moneda para financiar el déficit público y dijo que la reestructuración del sistema financiero intentará respetar por igual los intereses de bancos, ahorradores y deudores.
Mucho más combativo se mostró Duhalde, quien reiteró que no piensa aceptar 'presiones del capital extranjero', ni 'de las empresas de servicios públicos privatizados, que aplicaron tarifas excesivas, o de las petroleras que han ganado mucho'.
El presidente, que ha prometido crear un millón de puestos de trabajo, aprovechó una intervención en la radio pública para decir que 'la recuperación del trabajo y la producción será mucho más rápida de lo que imaginamos'.
FMI, nada ha cambiado
Duhalde ha enviado al canciller Carlos Ruckauf a Washington para recabar apoyo de EE UU de cara a las negociaciones con el FMI, y ayer se entrevistó con el secretario del Tesoro, Paul O'Neill. El secretario de Relaciones Económicas Internacionales argentino, Martín Redrado, que forma parte del séquito, dijo ayer que detecta buena disposición por parte de los organismos internacionales para retomar la ayuda internacional al país suramericano.
Sin embargo, el director gerente del FMI, Horst Köhler, declaró ayer a Reuters que 'nada ha cambiado'. Köhler citó como prioridades para Argentina restaurar el sistema de pagos y reestructurar el sistema bancario. En el terreno fiscal, considera crítico un acuerdo entre el Gobierno federal y las provincias.