La Estrategia de Barcelona, creada en el año 1995, rige las relaciones de cooperación entre los Quince y sus 12 socios de la ribera sur del Mediterráneo, con la mayoría de los cuales la UE tiene cerrados ya acuerdos de asociación.
La UE buscará “más posibilidades” para que Marruecos abra sus mercados a productos europeos, como los cereales, la leche y sus derivados. También se verán afectadas la carne y las oleaginosas.
Los negociadores de ambas partes intentarán poner fin al conflicto abierto el año pasado en torno a ciertos productos, como el tomate, que provocó tensiones debido a las diferentes interpretaciones sobre el cupo que Marruecos podía exportar a la Unión Europea.