Bruselas critica la falta de reformas de los planes económicos de Duhalde
Bruselas considera que el nuevo plan económico argentino es "útil", pero que adolece de propuestas fiscales, reformas del banco central y medidas que garanticen la supervivencia del sistema financiero. Los comisarios Solbes, Patten y Lamy presentarán su informe al próximo Ecofin, con el objetivo de que los Quince adopten un plan conjunto para la crisis argentina.
La Comisión Europea aprobó ayer un informe elaborado por los comisarios de Asuntos Económicos, Pedro Solbes; Relaciones Exteriores, Chris Patten, y Comercio, Pascal Lamy, sobre la situación argentina. El informe será debatido en el Ecofin del próximo martes día 22 y de ahí la Comisión pretende obtener una posición común de los Quince sobre la crisis y la implementación de medidas para intentar su solución.
El informe, de apenas siete páginas, destaca que, aunque los planes del presidente Eduardo Duhalde son "más serios" que los de sus predecesores, "carecen de elementos clave de credibilidad".
Entre éstos, "el impacto inflacionista de la devaluación, objetivos concretos de política fiscal, una definición clara del papel y los objetivos del banco central y un esquema creíble para preservar la confianza en el sistema bancario".
Bruselas expresa su preocupación por algunos aspectos "heterodoxos e intervencionistas" del programa, como "el tipo de cambio dual, la suspensión de pagos, la violación de las cláusulas tarifarias recogidas en los contratos con las empresas privatizadas y la introducción de posibles restricciones comerciales".
Bruselas echa en falta una estrategia para renegociar el pago de la deuda externa, un plan estructurado sobre la eliminación de las restricciones bancarias y una amplia reforma fiscal para aumentar la baja recaudación tributaria en relación al PIB.
Asimismo, aseguran que el incumplimiento de Argentina y las medidas proteccionistas anunciadas por Duhalde pueden tener un serio impacto para el futuro de la inversión directa extranjera no sólo en Argentina, sino en el conjunto de la región.
En el fondo de todo este panorama, la inestabilidad política y social. Los comisarios advierten que un nuevo fracaso del Gobierno en la solución de los problemas económicos y las divisiones en el seno del peronismo aumentan el riesgo de inestabilidad política e incluso de asistir a un nuevo "levantamiento militar", aunque ahora este riesgo parezca "mínimo".
Graves daños para España
Los comisarios descartan que la crisis tenga un fuerte impacto sobre la economía europea, dado el escaso peso de los intercambios comerciales con aquel país. Salvo en el caso de España, "especialmente para su sector bancario y energético". Asimismo, destaca que el comportamiento mostrado por los países de la región "sugiere que los efectos del contagio pueden ser limitados en esta ocasión", aunque alertan sobre la situación de Venezuela, Uruguay y Paraguay.
Solbes, Patten y Lamy insisten en que "el mundo no puede ser indiferente a la crisis argentina por su potencial para entrar en una espiral fuera de control". Por ello, consideran que la UE debería examinar sus propios instrumentos de ayuda y considerar la mejor manera de apoyar a Argentina y al conjunto de la zona. Eso es lo que pretenden conseguir en el próximo Ecofin.
Previamente, exigen al Gobierno la consecución de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la adopción de medidas "no discriminatorias y conforme a las reglas comerciales y financieras internacionales".
Uno de los caminos por el que los Quince pueden contribuir a la estabilidad de la región es, a su juicio, seguir trabajando en la negociación de un acuerdo comercial con la unión aduanera del Mercosur (formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). En su opinión, "un reforzamiento del Mercosur será clave para el desarrollo de la región" y piden a los Quince seguir adelante con las negociaciones, pese a las escasas posibilidades de un próximo acuerdo, para "demostrar su apoyo a Argentina y a todo el Mercosur".