Brasil recibe con calma las nuevas medidas económicas de Argentina
El plan de emergencia económica aprobado el domingo por el Congreso argentino apenas tuvo impacto en la evolución del mercado brasileño. A media sesión la Bolsa subía un leve 0,24%. Los expertos ven un riesgo de contagio muy limitado en Brasil y advierten que la evolución de las Bolsas estadounidenses será la verdadera clave en su comportamiento futuro.
La Bolsa de Buenos Aires se mantuvo cerrada ayer para dar tiempo a que el Gobierno anuncie el porcentaje de devaluación e implemente las nuevas normas vigentes. El compás de espera durará hasta el próximo miércoles y será entonces cuando se conozca la primera reacción del mercado a las nuevas medidas económicas.
Brasil sí abrió sus puertas ayer, pero apenas reaccionó a los últimos acontecimientos en su país vecino. Los expertos coinciden al señalar que la recuperación de Estados Unidos será mucho más determinante en su comportamiento y no ven un riesgo de contagio por Argentina. "A mediados de octubre hubo una desvinculación del mercado brasileño que ha permitido que el real se aprecie un 20% y que la Bolsa se recupere", señala Lucas Vicier, de AFI. Brasil cerró el ejercicio con una caída del 11,02% frente al retroceso del 29,12% del Merval argentino. La diferencia podía haber sido mayor.
La crisis económica que azota Argentina ha convertido la Bolsa en un refugio clave de los inversores desde diciembre. El Merval gana el 70% desde entonces. El miedo a dejar los ahorros en el banco y el deseo de esquivar la inminente devaluación facilitaron esta tendencia.
La tasa de riesgo-país (diferencia entre el bono argentino y una cesta de bonos de referencia), por otra parte, remitió ayer hasta situarse en los 3.929 puntos básicos. Este índice tocó un máximo de 5.470 puntos el 26 de diciembre. En las últimas siete sesiones este indicador cae el 28%. Algunos expertos consideran que el retroceso se debe a las compras oportunistas de bonos argentinos, a la espera de que estos títulos se revaloricen una vez se concreten las nuevas medidas económicas.
El bono argentino a cinco años sí cotizó ayer en los mercados y a media sesión rompía con dos sesiones consecutivas de avances y se dejaba el 2,92%.
Los expertos se muestran reticentes a realizar predicciones sobre la senda que tomará el mercado argentino el miércoles, aunque no descartan que el fin de la paridad dólar peso pondrá freno a la escalada bursátil.
Muchos inversores aprovecharon para cambiar sus títulos a dólares y venderlos en Nueva York, una práctica que acentuó la tendencia alcista del mercado. Por ello algunos analistas como Vicier esperan que la Bolsa frene su escalada, opinión que comparte Vicente González de Ibersecurities.
Susana García, de Gaesco, por otra parte, no descarta que el mercado siga al alza si la situación empeora.
Las nuevas medidas económicas, de tinte proteccionista y nacionalista, generan dudas por el lado de la inflación. "Si se traduce en inflación no se gana competitividad y hay que ver si los argentinos están dispuestos a pensar en pesos tras 11 años de paridad", señala Vicier.
Las incógnitas no quedan ahí. La reacción social será clave. La denominación en pesos de los créditos inferiores a 100.000 dólares aliviará tensiones, pero queda por ver si el Gobierno devolverá íntegramente los depósitos como ha prometido. El Ejecutivo aprobará además un impuesto especial sobre las exportaciones de compañías petroleras para compensar en parte las pérdidas de los bancos.
La banca, los servicios y las petroleras serán por tanto los principales castigados en Bolsa, aunque ciertas empresas con perfil exportador podrían seguir al alza, según los expertos.
La incertidumbre política es otro foco de inestabilidad. Algunos expertos temen el rechazo a medidas neoliberales tras el fracaso de la convertibilidad.