Hamás anuncia la suspensión de los atentados contra Israel
El grupo islámico Hamás anunció ayer la suspensión de los ataques contra los israelíes solicitada por el líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat. "Declaramos la suspensión de los ataques de martirio dentro de las tierras ocupadas de 1948 y una suspensión de los ataques de morteros hasta nuevo aviso", dijo Hamás en un comunicado, en referencia al Estado Judío, que fue fundado en 1948.
Pero funcionarios israelíes restaron importancia a la decisión, tomada después de conversaciones entre Hamás y la Autoridad Palestina.
"æpermil;sta es una medida táctica de Hamás, que es una organización terrorista", dijo Gideon Meir, un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí. "Creo que hay un acuerdo, un pacto para que se pospongan por un tiempo las represalias (contra activistas islámicos radicales)", opinó.
Hamás es la principal organización responsable de una reciente ola de atentados suicidas que dejaron 29 muertos en Israel el mes pasado. Con la interrupción de la violencia se espera impedir que los choques entre la policía palestina y Hamás empeoren la situación hasta convertirse en una guerra civil, 15 meses después de un levantamiento contra la ocupación israelí en el que han muerto al menos 786 palestinos y 233 israelíes.
Hamás, al igual que la Yihad Islámica, rechaza todo compromiso con Israel y llevan mucho tiempo atacando objetivos judíos. La Yihad no ha aceptado la suspensión de la violencia pedida por Arafat para frenar los ataques que los palestinos están sufriendo por el Ejército israelí.
Ayer mismo al menos cinco personas murieron y más de 70 resultaron heridas en duros enfrentamientos en el campo de refugiados de Yabalia entre activistas islámicos y la policía de la ANP. Los enfrentamientos, dijeron algunos testigos, se extendían como "un reguero de pólvora" a los campos de refugiados de Nuseirat, Jan Yunes y Deir el-Balaj, todos en la franja de Gaza, sin que los agentes del orden pudieran contener a los manifestantes contra el Gobierno de Yasir Arafat.