_
_
_
_
epigrafe

La justicia investiga la venta desde Benavente de carne contaminada

El fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Zamora y la Consejería de Sanidad de Castilla y León han iniciado sendas investigaciones para comprobar la supuesta venta de carne contaminada por parte de una firma de Valladolid desde un matadero de Benavente (Zamora).

La empresa vallisoletana burló reiteradamente los controles veterinarios para incorporar a la cadena alimentaria animales, principalmente ovejas y en ocasiones también vacas, previamente decomisadas por los controles sanitarios al estimar posibles daños para la salud, según varias informaciones publicadas por el diario La Opinión de Zamora.

Testimonios de los propios trabajadores de la firma sostienen que los animales decomisados eran serrados por la mitad, se les extraía la médula y eran arrojados desde una cinta transportadora a la sala de despojos. "Cuando los veterinarios no estaban los volvíamos a subir, les quitábamos el sello, les poníamos otro del matadero y les dábamos salida", relatan los empleados. Y continúan: "Los lunes llegábamos al matadero antes que nadie. Íbamos por las cuadras recogiendo los bichos muertos a toda leche. Algunos llevaban cuatro días muertos, otros menos. Los desollábamos antes para que no los vieran los veterinarios ni nadie".

Las actuaciones también se desarrollaban en la cámara de decomisos donde iban destinados las canales que habían sido desechadas por los veterinarios y marcadas con una D. "Cuando sabíamos que había ganado en la cámara de decomisos íbamos los sábados y arramplábamos con todo, hasta con las vacas. Los sábados porque no estaban ni los veterinarios ni los trabajadores. Quitábamos el sello de decomiso a las canales, le poníamos otro con letras árabes y cargábamos todo en una trailer que las llevaba a una picadora de carne de Barcelona".

Esta picadora de carne de Barcelona es, en realidad, una firma transformadora de Olot, cuyo nombre no ha sido revelado, que transforma las canales cárnicas en todo tipo de formatos directamente orientados hacia el consumo. Según el rotativo citado, esta firma distribuye sus productos cárnicos en Francia, Italia, Grecia y Reino Unido. Además, testimonios recabados entre los conductores que transportaban las canales a esta transformadora aseguran que la práctica de utilizar para la cadena alimentaria carne desechada es práctica habitual en otros mataderos.

La delegada territorial de Zamora, Carmen Luis Eras, ha confirmado que existen dos expedientes sancionadores abiertos con anterioridad contra estas empresas, uno de ellos por la comisión de una falta grave.

Algunos de los trabajadores que denuncian las presuntas prácticas irregulares cometidos en el matadero de Benavente también afirman haber contraído la fiebre de malta debido al contacto con los residuos de animales ovinos infectados con la enfermedad de la brucelosis, causa principal de los decomisos de canales.

Archivado En

_
_