Los grupos bancarios ganan 801.000 millones, con un crecimiento del 14%

La desaceleración económica y la crisis de los mercados se ha trasladado ya a los resultados de la banca. Los grupos bancarios consolidados obtuvieron en los nueve primeros meses del año un beneficio de 801.000 millones de pesetas (4.817 millones de euros), un 14% más que en el mismo periodo de 2000, tasa 10 puntos inferior a la del trimestre anterior. Consideradas sólo las matrices, que reflejan la actividad en España, el resultado neto fue de 651.155 millones de pesetas, un 8,6% más, aunque se estanca el porcentaje sobre activos totales medios. La mejora en el margen de intermediación y las plusvalías compensaron la caída de comisiones y operaciones financieras y los fondos para sanear los balances

Los grupos bancarios consolidados que operan en España -que forman 22 grupos bancarios y dos subgrupos- cerraron los nueve primeros meses del año con un beneficio atribuido de 801.000 millones de pesetas (4.817 millones de euros), lo que supone un crecimiento del 14% sobre igual periodo del año anterior.

Esta subida, aunque positiva y más en un entorno de incertidumbre económica, es inferior a la registrada en el primer semestre del año (24,3%), lo que confirma el peor comportamiento de los resultados de los bancos en el tercer trimestre. Aunque tampoco hay que olvidar que estos resultados se han visto más afectados por los dos fondos anticrisis creados por el Santander Central Hispano (de 750 millones de euros) y el BBVA (por 200 millones de euros) que por la obtención de menores ingresos.

Destaca el crecimiento del negocio de estos grupos, influenciados por la ampliación del perímetro de consolidación debido a la incorporación de los bancos adquiridos en Latinoamérica a lo largo del año 2000 por el Santander y el BBVA. Julio Rodríguez, asesor técnico de la AEB, mantiene que la cuenta de resultados consolidada puede mostrar una visión engañosa de los crecimientos de los beneficios y márgenes por estas incorporaciones latinoamericanas.

De hecho, sólo estos dos grupos acaparan el 82% de los activos consolidados del conjunto de los grupos bancarios, que ascienden a 135 billones de pesetas, y el 81,5% de los beneficios.

Si se compara la cuenta de resultados consolidada con la de los bancos a nivel individual se detectan crecimientos mucho más elevados en prácticamente todas las partidas (negocio, márgenes, gas-tos de explotación y resul-tados). Esto se explica por la influencia que tienen las zonas de implantación de las filiales del BBVA y Santander, con tipos de interés superiores a los nacionales. Aunque, por contra, el mayor riesgo de las operaciones en aquellos mercados requiere realizar dotaciones para insolvencias más elevadas, 457.000 millones de pesetas, el 72,3% más, y a la amortización de los fondos de comercio (se ha destinado cuatro veces más que un año antes).

Banca en España

El beneficio neto de los bancos a nivel individual, que coincide prácticamente con su actividad en España, asciende a 651.155 millones de pesetas (3.913 millones de euros), el 8,6% más. Este resultado se obtiene gracias al crecimiento del negocio y a los resultados extraordinarios (plusvalías por venta de la cartera de valores), ya que el resto de las partidas ha tenido comportamientos más bien negativos. Este último capítulo ha aportado unos beneficios de 252.000 millones de pesetas, frente a los 69.000 millones de un año antes. Estas plusvalías han compensado la caída del 2,4% del margen de explotación.

Hasta junio los bancos en España habían ganado 473.551 millones (+15,8%).

El margen de intermediación crece el 9,7%, influenciado por la aportación de los dividendos de las entidades participadas por los bancos, que han sumado 321.000 millones de pesetas, el 32,5% más que un año antes. El aumento de este margen, así como las plusvalías, ha compensado la caída de las comisiones, resultados por operaciones financieras y las mayores dotaciones para insolvencias, que han sido de 188.000 millones, de los que 135.000 han correspondido al fondo estadístico. La cobertura de la morosidad (421.000 millones de pesetas) es del 231%. La caída de la Bolsa ha provocado unas necesidades de dotaciones de 45.000 millones.

15 bancos presentan pérdidas hasta septiembre, que suman unos números rojos de 18.176 millones de pesetas, de los que el 43%, es decir, 7.875 millones, corresponden a los bancos de Internet.

 

Algunas oficinas estarán abiertas el 1 de enero

Los responsables de la Asociación Española de Banca (AEB) dejaron ayer de nuevo claro que consideran innecesario que las entidades bancarias abran sus oficinas en España el próximo 1 de enero para facilitar la difusión del euro. Admitieron que crece la presión desde Bruselas para que se abra, pero recordaron que el día 1 es festivo, por lo que no creen que haya demanda suficiente en las oficinas bancarias que justifique la apertura, con el consiguiente malestar de las plantillas y problemas de inseguridad.

No obstante explicaron que, probablemente, a falta de un pronunciamiento del Ministerio de Economía, lo normal es que cada entidad decida voluntariamente qué hacer ese día. La opinión del asesor técnico, Julio Rodríguez, es que probablemente bancos y cajas decidan abrir con servicios mínimos en función de la localización de las oficinas, centros comerciales o de ocio donde haya locales que en esa fecha pudieran necesitar efectivo.

En todo caso, Julio Rodríguez recordó que las oficinas del Banco de España estarán disponibles y casi el 90% de los cajeros automáticos dará ya efectivo en euros.

Entre tanto ha finalizado ya casi por completo la fase de predistribución de monedas a las entidades bancarias. Se inicia ahora la distribución a los grandes almacenes, que se han comprometido a devolver el cambio en euros para facilitar su uso.

 

Frenazo

para los depósitos

de ahorro y los créditos

El deterioro económico profundizó en septiembre la desaceleración de las principales partidas del balance de los bancos radicados en España. El frenazo es llamativo en los depósitos de ahorro, que ascienden a 43,9 billones de pesetas (264.133 millones de euros), con una tasa interanual de crecimiento del 4,3% en septiembre de 2001, frente al 21% 12 meses antes. Los bancos encontraron más dificultades para captar depósitos a la vista, que sólo crecieron un 3,8%, que depósitos a largo plazo, que aumentaron un 5,2%.

La desaceleración ha sido más progresiva, pero también notable, en los créditos, con una tasa de aumento del 6,7% este año, la más baja desde abril, frente al 12,6% en septiembre de 2000. El volumen asciende a 51,4 billones de pesetas (309.176 millones de euros). El desfavorable entorno económico está en la raíz de este comportamiento, pero también influye que la rebaja de los tipos de interés anima a muchas empresas a cancelar los créditos existentes. La desaceleración se centra principalmente en el crédito a las empresas y al sector público, mientras que el crédito hipotecario mantiene todavía un vigoroso crecimiento. En este contexto, cabe destacar el recorte en más de dos puntos porcentuales el último año del euribor.

En cuanto a los grupos consolidados, destaca el parón en la concesión de préstamos tanto de BBVA como del Santander, con ascensos del 0,2% y 3,1%, respectivamente, tanto por el negocio en España como en Latinoamérica.

Destaca, también, el leve crecimiento de la cartera de títulos de renta variable y participaciones (8,3 billones de pesetas frente a 8,04 billones en diciembre de 2000), en contraste con el aumento de la cartera en deuda del Estado (de 7,6 billones a 8,8 billones).