El 41% de los consumidores no reconoce las etiquetas ecológicas
Aunque precio y calidad son los criterios que priman a la hora de comprar un producto, el 41% de los consumidores españoles no conoce el sistema de etiquetado ecológico, por lo que no sabrían reconocer un producto de calidad correcta desde el punto de vista medioambiental. La Fundación Entorno acaba de denunciar este problema de desinformación, entre otros.
De los 2.000 españoles consultados por la Fundación Entorno -en colaboración con QuotaUnión, del Grupo SigmaDos- para realizar su segundo estudio sobre las pautas de consumo de productos ecológicos, 940 se manifestaron dispuestos a pagar una prima del 10% más por ellos. Aseguran, además, que lo elegirían incluso a pesar de alguna merma de calidad respecto a otro producto menos respetuoso con el entorno.
Ahora bien, en la práctica, sólo dos de cada cinco encuestados afirmaron haber elegido algún producto por sus cualidades medioambientales. Este año ha subido la demanda de productos ecológicos de papel, en detrimento de los de limpieza e higiene personal.
El análisis de este segundo trabajo de campo ha llevado a la directora de la Fundación Entorno, Cristina García-Orcoyen, a denunciar durante la decimoquinta sesión del Club de Debate, que organizó la Fundación el pasado jueves, la "falta de efectividad de los actuales instrumentos para estimular la demanda verde", entre los que figuran fundamentalmente las ecoetiquetas. García-Orcoyen, que también es parlamentaria europea, se ha alineado con las propuestas del recientemente publicado Libro Verde de política integrada de producto. Entre ellas figuran desde medidas para implicar a las empresas en los análisis de los ciclos de vida de sus productos hasta la promoción de una política pública de compras que favorezca a los productos ambientalmente correctos o la reformulación del ecoetiquetado europeo.
La ineficacia del complejo sistema de etiquetado actual es especialmente inaudita en España, porque sólo un 48% de los entrevistados declaró que mediante el etiquetado era posible distinguir un producto correcto desde el punto de vista medioambiental. Pero el 41% reconoció que no sabría distinguir unas etiquetas de otras y sólo un 22% declaró que las ecoetiquetas les merecían garantía de credibilidad. De hecho, las etiquetas que han alcanzado más notoriedad son la de identificación del material con el que se fabrican la mayoría de las botellas de plástico para bebidas (polietileno tereftalato o PET), así como de otros materiales reciclables; la de Punto Verde, el sistema de Ecoembes al que se adhieren los fabricantes para garantizar la recuperación de los envases, y la de Aenor Medio Ambiente, que figura en muchos electrodomésticos y botes de pintura. En cambio, sólo un 14% reconoce la ecoetiqueta europea.
El 64% de los consumidores se decide, a la postre, por la marca que conocen. Así se pone de manifiesto en el índice de imagen ambiental, que también elabora la Fundación Entorno para averiguar qué empresas gozan de mayor reputación en este sentido. Las ganadoras resultaron Telefónica y Coca-Cola, respectivamente, con el 7,4% y el 6,1% de los votos de 6.000 encuestados. Les siguen, a distancia, Body Shop (4,7%) y Bayer (3,2%).