Bankinter paraliza las contrataciones y cobrará comisiones por más servicios

Bankinter se ha marcado como objetivo para lo que resta de año y para 2002 reducir sus costes e incrementar los ingresos. Para ello el banco ha paralizado la contratación de personal, no renovará a 100 becarios, negocia con sus 250 socios y red de agentes un nuevo reparto de los beneficios y dará de baja a clientes inactivos.

Bankinter ha decidido apretarse el cinturón para capear el temporal. Este es uno de los principales mensajes transmitidos por el consejero delegado del banco, Juan Arena, a sus directivos en una reunión mantenida el pasado mes de octubre. El problema es que la estructura de Bankinter, ya de por sí muy ajustada, permite poco margen de maniobra para lograr este objetivo.

Otra de las metas del banco en las que Arena insistió fue en la necesidad de aprovechar las nuevas oportunidades de negocio, sobre todo tecnológicas. En este acto, Arena dio las claves que regirán en el banco en lo que resta de año y que tendrán especial énfasis en 2002.

Aumentar los ingresos y reducir costes puede constituir el resumen de este acto, que tenía como telón de fondo la incertidumbre económica tanto nacional como internacional.

Para poner en marcha esta política, Bankinter ha iniciado ya un férreo control de sus gastos, que lleva consigo también el cobro de servicios hasta ahora gratuitos.

Entre estos servicios que Bankinter ha decidido iniciar en breve su cobro, se encuentra el agregador de cuentas de Ebankinter (servicio por el cual un cliente puede comprobar en Internet su saldo en cualquier entidad bancaria), la Intranet y la sociedad de comercio electrónico de Energía que pone en contacto a empresas de este sector de Ebankinter. Aunque la gama de productos y servicios a los que se les comenzará a aplicar comisiones es más amplia, el banco negociará con el cliente estos cobros.

Nuevo reparto del beneficio

Además negociará con sus 250 socios o proveedores nuevas fórmulas de reparto del beneficio que se obtiene por sus servicios a través de Bankinter. Hasta ahora estos beneficios se repartían al 50% entre el banco y el socio, política que está sufriendo una transformación, ya que el proyecto de Bankinter es que este reparto deje de ser equitativo para pasar a favorecer más al banco.

Esta nueva política también afectará a su red de 1.450 agentes. Estos representantes financieros ingresarán un 10% menos de media desde el próximo año, ya que la idea es que aporten más negocio de valor añadido, como el asesoramiento y la banca privada (segmento este último en el que prevé abrir 17 puntos de venta de banca privada) y asuman la mitad de los costes operativos.

Pero éstas no son las únicas medidas. Bankinter ha trasladado a todos los responsables de área la necesidad de reducir al máximo sus costes.

Para ello les ha pedido que presenten iniciativas encaminadas a reducir gastos en todos los departamentos. Entre estos planes destaca el mensaje lanzado por Arena de no contratar a más personal (el banco realizaba al año una media de 150 nuevas contrataciones, sobre todo para banca telefónica). "Contratación cero", señalan fuentes de la entidad, que, tampoco descarta que en un futuro se pueda optar por una reducción de plantilla, "aunque, de momento, no hay nada previsto, todo depende de los informes que nos trasladen los responsables de cada área". Las mismas fuentes reconocen que se ha decidido prescindir de gran parte de la figura de los becarios (en concreto, de 100), que eran contratados para actividades muy concretas, como Internet y banca telefónica.

Reducir los gastos de marketing, que en el año 2000 ascendieron a 1.400 millones de pesetas, y los variables, como gastos de comida, que se recortan en un 20%, los del uso de móviles, que bajarán un 15%; los de correo o los viajes, que pretenden disminuir en otro 20%, forman parte también de los objetivos establecidos por el banco para los próximos meses y el ejercicio 2002.

Bankinter también pretende aumentar sus ingresos, para lo que entrará en "nuevas aventuras tecnológicas", como la banca por móviles. Además potenciará algunos de los servicios que ahora ofrece.

Por el contrario, el banco ha iniciado la reducción de su negocio en pérdidas, con el cierre o limitación al máximo de aquellos canales que no sean rentables. Lo mismo sucede con los clientes inactivos, a los que el banco ha decidido dar de baja, "puesto que suponen un coste de mantenimiento".

Talento ante la crisis

Arena tampoco olvidó en su exposición recordar a los empleados del banco que en momentos de incertidumbre o crisis la principal fortaleza de Bankinter está en la "gestión del talento", razón por la que la entidad quiere convertir este proyecto en uno de los principales incentivos, la búsqueda de fórmulas para capear mejor la crisis por parte de los empleados.

Bankinter, por otra parte, es una de las principales entidades perjudicadas por las llamadas comisiones interbancarias (las que se cobran las entidades financieras entre sí por operaciones como abono de efectos, letras, domiciliaciones, transferencias o cheques). El coste de estas comisiones para Bankinter puede rondar los 1.000 millones de pesetas al año.