Expertos en sanidad cuestionan la política de control del gasto del PP
El bienestar económico frena la eficacia de las medidas para contener el gasto en farmacia, y éstas cada vez tienen más difícil alcanzar el éxito. æpermil;sta es una de las principales conclusiones del estudio que Farmaindustria ha encargado a la consultora Nera para promover el debate sobre el futuro del sector farmacéutico en España. El informe cuestiona las políticas de contención adoptadas por el Partido Popular desde 1996.
La prestigiosa consultora National Economic Research Associates (Nera) echó ayer un jarro de agua fría sobre la política de control del gasto farmacéutico adoptada por el Partido Popular desde su llegada al poder en 1996.
En su informe Diagnóstico y perspectivas del gasto farmacéutico en España, elaborado por encargo de Farmaindustria, la consultora afirma que, de las medidas para contener el gasto en medicamentos puestas en prácticas en España en los últimos años, sólo la reducción de márgenes aprobada en 1997 -el de los mayoristas pasó del 12% al 11% y el de las oficinas de farmacia del 29,9% al 27,9%- ha tenido efectos significativos sobre la evolución de las series de gasto y consumo farmacéutico. Con todo advierte que su efecto "fue transitorio, y el gasto en medicamentos recuperó sus niveles anteriores un año después de su puesta en práctica".
Como se recordará, después de aquello, el Gobierno volvió a recurrir a la lista negativa en 1998, redujo precios en 1999 y aprobó el sistema de precios de referencia en diciembre de 2000, la única de las decisiones políticas no analizada en el documento, por entender los investigadores que aún ha pasado poco tiempo para comprobar sus efectos económicos.
Pese a esta primera apreciación tan negativa, el informe Nera echa un capote a las autoridades españolas al afirmar que "dada la estructura de la población y el crecimiento previsto de los niveles de renta, será difícil que tenga éxito cualquier medida que trate de contener el crecimiento del consumo farmacéutico total (público y privado)", que calculan aumentará una media anual del 6% en los próximos tres años.
Los consultores consideran los copagos como una fórmula adecuada para contener la demanda y advierten que el porcentaje que representa el copago en el consumo farmacéutico español se reducirá un punto porcentual en los próximos cuatro años "si no se adoptan medidas", pero se muestan reacios a promover limitaciones directas del gasto o a aprobar listas negativas de medicamentos, como se hizo en el pasado, "porque pueden provocar el desabastecimiento de productos y una reducción de la calidad de la atención".
Pese a estar patrocinado por Farmaindustria, el director general de la patronal, Humberto Arnés, aseguró a este periódico que las opiniones vertidas en el estudio no "son asumidas en absoluto por la patronal", en referencia expresa al copago.
Por otro lado, la Fundación Jiménez Díaz continuará su actividad asistencial después de aceptar ayer los 1.000 millones que le prometió Villalobos para el año 2000. Aún queda por resolver el problema de la deuda, cuantificada en 6.000 millones de pesetas.