La firma eliminó 2.300 puestos (elevando a 6.100 los despidos desde enero) y el presidente ejecutivo, David Komansky, avisó ayer que habrá más recortes. La prensa americana habla de 10.000 supresiones más, pero el banco dice que no hay una cifra definida. Además, desmintió que vayan a abandonar su edificio en el World Financial Center (piensan volver a él a finales de la semana próxima) o a dejar los negocios en India. Sí prevé, sin embargo, recortes en Canadá, Japón y Australia.
El Bank of New York ganó un 33% menos este trimestre, debido también a los daños provocados por los atentados.