La consultora de Ana Patricia Botín despide a 41 empleados, el 33% de la plantilla
Ana María Llopis, consejera delegada de Razona (antigua Coverlink), afirma que, "aunque la decisión ha sido difícil, era necesaria para dar coherencia a la estrategia de la empresa, que quiere centrarse en la consultoría de negocio y abandonar el desarrollo de web".
Razona, la consultora de Internet participada en un 98% por Ana Patricia Botín, ha despedido a 41 empleados de los 126 que tenía la compañía, lo que supone el 33% de la plantilla. Ana María Llopis, consejera delegada de Razona (antigua Coverlink), afirma que, "aunque la decisión ha sido difícil, era necesaria para dar coherencia a la estrategia de la empresa, que quiere centrarse en la consultoría de negocio y abandonar el desarrollo de web".
Además, según Llopis, la medida debía tomarse para adecuar Razona a las condiciones de mercado, "que han empeorado tras el verano". La empresa, que preveía facturar este año entre 10 y 12 millones de euros (entre 1.800 y 2.000 millones de pesetas), contaba con algunos proyectos que, tras cerrarse este verano, se han paralizado en septiembre. Ello ha provocado una rebaja de previsiones de facturación. Un trabajador de Razona que prefiere mantener el anonimato asegura que, aunque la empresa trata de justificar los despidos por el descenso de la demanda de servicios relacionados con Internet, "la mala situación financiera se debe principalmente a la mala gestión del equipo directivo". La misma fuente afirma que "un equipo gestor con dilatada experiencia, contratado a base de sueldos millonarios y con el único propósito de reflotar la compañía no puede basarse en ese argumento para justificar dichos recortes de plantilla".
Según este trabajador, existen oportunidades de negocio pese a la recesión actual, "pero en Razona no hay ni estrategia de empresa ni una política comercial adecuada". Llopis se defiende: "Hemos querido centrarnos en la consultoría de negocio y abandonar el desarrollo de web, y en esa dirección trabajamos desde entonces".
Según Llopis, el 80% de las personas despedidas se dedicaban a ese último punto, donde en su opinión "había un exceso de personal". Llopis no entiende el comentario que elude a los sueldos de los directivos. "He hecho un análisis de viabilidad serio y la rees-tructuración ha afectado también al cuerpo directivo. Incluso ha salido el segundo de la compañía", dice.