_
_
_
_

El parón de la demanda permite reducir la inflación al 3,4%

La inflación comienza a ceder seriamente. En septiembre el índice de precios de consumo se mantuvo estable y propició una bajada de la tasa anual de inflación (la generada en los últimos 12 meses) desde el 3,7% hasta el 3,4%, valor no registrado desde hace 15 meses. Este descenso es imputable a la caída de precios más sensibles a la demanda de servicios, así como a la energía. La tasa subyacente bajó una décima, al 3,5%, pero ya está por encima del índice general.

El índice de precios de consumo (IPC) se aleja por fin del 4%, tasa que ha rondando durante los últimos meses por la presión de la alimentación, los precios de los carburantes y la paulatina tendencia alcista de la inflación subyacente (la que excluye precisamente alimentos frescos y energía).

En septiembre el IPC se mantuvo estable, frente a un avance de 0,3 puntos en septiembre de 2000, lo que provocó un descenso muy notable en la variación interanual (tasa generada en los últimos 12 meses), desde el 3,7% hasta el 3,4%. Contribuyeron especialmente el avance escaso de los precios de los productos energéticos, que subieron sólo un 0,2%, frente a un avance del 1,4% en septiembre de 2000, como los descensos en los precios de los servicios más ligados a la sensibilidad de la demanda nacional. En concreto, los precios de los servicios de ocio y cultura y hoteles y restaurantes.

Los precios de ocio y cultura cayeron un 1,4% en septiembre, lo que coloca su particular tasa anual en el 2,7%; en cuanto a los precios de los servicios turísticos tradicionales (hoteles, cafés y restaurantes), cayeron un 1,3% en septiembre, pese a que mantienen una tasa en 12 meses del 5,1%.

Estas dos rúbricas aportaron en el mes un descenso del IPC de 0,274 puntos, que fue compensado por el aumento de los precios de la alimentación, especialmente la elaborada. æpermil;sta creció un 0,7% sobre agosto, empujada por los avances en los precios de las carnes y pescados congelados, así como la leche, el pan o los cereales. Pese a que las carnes experimentaron fuertes subidas, con un 6,2% en el cordero y 1,3% en el vacuno (bajó la de cerdo un 1,3%), la patata y sus preparados descendieron un 12,6%, lo que compensó los avances antes citados. En resumen, la alimentación subió un 0,4% y aportó casi una décima de avance; el tabaco subió también un 1,3% y aportó 0,04 puntos positivos.

Alimentos en alza

En términos anuales la alimentación registra ahora la tasa más alta de toda la cesta del consumo, con un avance del 6,4%; su componente elaborado tiene una tasa anual del 4,3%, mientras que la no elaborada llega al 8,4%.

Este comportamiento más moderado de la alimentación elaborada, junto con la caída de precios de los servicios más ligados a la demanda privada, en parte empujada por la desaceleración económica y la revisión de expectativas que los agentes económicos han hecho del consumo en la segunda parte del año, han provocado que la inflación subyacente descienda por vez primera en muchos meses. Ha bajado una décima en el mes y en tasa anual desciende desde el 3,6% al 3,5%. Esta tasa, no obstante, mirada fotográficamente, revela una inflación muy alta, pues está muy alejada del objetivo del 2% que marca el Banco Central Europeo. Además, por vez primera en más de dos años, la tasa subyacente (el núcleo duro de la inflación) está más alta que el índice general.

De hecho, las mayores aportaciones a la tasa anual de inflación las hacen ahora los servicios, que han aumentado en un 3,9% entre septiembre de 2000 y septiembre de 2001 y la alimentación elaborada, que tiene un avance anual del 4,3%, excepción hecho de los productos frescos, que llegan al 8,4%.

La energía, que ha sido el azote de los precios en los dos últimos años, ya ha cedido terreno y se encuentra en tasa anual negativa del 3%; los combustibles y carburantes en concreto registran tasa anual negativa del 2,8%. Es cierto que las altas tasas registradas por estos productos en los últimos años han activado la tasa subyacente por el encarecimiento de los procesos industriales y el reflejo que produce en la formación de precios en general.

 

"Un 3% en poco tiempo"

El Ministerio de Economía estima que la tendencia bajista de la inflación, que acumula ya un descenso desde máximos de ocho décimas, se prolongue en los próximos meses, empujada por componentes estructurales y algunos aún coyunturales. El Gobierno sigue pensando que "el índice de precios estará en una tasa anual del 3% en poco tiempo", aunque ahora no precisa cuándo.

Estima que la presión de los precios energéticos seguirá cediendo en los próximos meses, ayudada por una mayor moderación en los precios del crudo, como consecuencia de la desaceleración de la demanda internacional. Además, proseguirá la contracción de la demanda interna, y se recogerá en los próximos meses el efecto de un euro relativamente apreciado respecto a meses pasados.

En septiembre la tasa armonizada (que mide con métodos comunes en toda Europa) ha bajado también hasta el 3,4%. Pero no habrá alivio del diferencial de precios con la eurozona, ya que en otros países el descenso ha sido superior; es el caso de Alemania, donde el índice ha bajado desde el 2,6% al 2,1%.

Por comunidades, la más alta se registra en La Rioja y País Vasco, con un 3,9%.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_