Nortel prevé 19.000 despidos y Alcatel anuncia 3.000 más
La crisis económica mundial sigue pasando factura. El fabricante canadiense de fibras ópticas Nortel prevé un ajuste de 15.000 a 19.000 puestos de trabajo como consecuencia de unas pérdidas ya anunciadas. Lo mismo ocurre con Alcatel, que advierte de otros 3.000 despidos más en la división de fibra óptica y redes submarinas. En total, Alcatel anuncia una reducción de 25.000 empleos para este año.
Nortel, fabricante de fibras ópticas y redes, acabó el segundo trimestre con unas pérdidas de 3,8 billones de pesetas y no espera mejores resultados para el cierre del ejercicio. Como medida de choque, la empresa, presidida por John Roth, baraja despedir entre 15.000 y 19.000 trabajadores para reducir drásticamente los costes laborales.
Estos datos confirman las dificultades por las que atraviesa el sector de las telecomunicaciones, sobre todo "en esta situación de deterioro que sufre el mercado tras los atentados del pasado 11 de septiembre".
Alcatel, compañía francesa de equipos de telecomunicaciones, dijo ayer que prevé reducir alrededor de 3.038 puestos de trabajo más de lo que ya había anunciado, en sus actividades mundiales de fibra óptica y redes submarinas para el próximo verano.
En total, Alcatel ha advertido que suprimirá este año 25.000 empleos de su plantilla, compuesta por 110.000 personas. Hasta ahora, Alcatel ya ha suprimido el 48% de la plantilla de su división de redes submarinas, es decir, 2.151 puestos de trabajo.
En esta cifra está incluida la supresión del empleo procedente de la clausura de la fábrica de Estados Unidos, anunciada el pasado mayo.
El cuarto fabricante europeo de equipos de telecomunicaciones tuvo unas pérdidas de 3.200 millones de euros (alrededor de 533.120 millones de pesetas) en el segundo trimestre y una caída del 12% de la factuación, hasta 6.770 millones de euros (1,12 billones de pesetas). Esta difícil circunstancia ha acelerado el proceso de reestructuración que ahora persigue la compañía.
Por su parte, la compa-ñía de telecomunicaciones World-Com afirmó ayer que mantendrá sus operaciones en Europa, aunque reconoció que llevará a cabo un recorte de personal, que afectará aproximadamente a unas 1.000 personas, debido a la integración de sus actividades con Uunet.