Commerz y Dresdner estudian recortes de plantilla adicionales
Sobre la industria bancaria alemana vuelve a planear la sombra de una nueva reestructuración de plantilla. Un portavoz del Commerzbank afirmó ayer que probablemente hará falta eliminar entre 2.000 y 4.000 puestos de trabajo para recortar gastos. El Dresdner Bank también se plantea volver a aplicar la tijera, después de que hace 15 días anunciara el despido de casi 8.000 trabajadores.
La banca alemana afronta una etapa de reestructuraciones en las plantillas. A las ya anunciadas por el tercer banco del país, el Dresdner, se une la que va a llevar a cabo su competidor, el Commerzbank. Un portavoz declaró ayer a medios de comunicación en Alemania que el consejo va a tomar la decisión de despedir personal en su reunión prevista para el 15 de octubre.
Estos planes de reestructuración acabarán con los puestos de trabajo de entre 2.000 y 4.000 empleados. Actualmente, el banco le da trabajo a 40.100 personas, aproximadamente. Hace dos semanas, los medios de comunicación en Alemania publicaron que la entidad iba a prescindir del 10% de la plantilla, noticia que el banco se negó a confirmar.
A pesar de esta negativa, pocos analistas en el país dudan de que el Commerz vaya a llevar a cabo despidos. La intriga proviene más bien de la cantidad exacta de empleados que se van a ver afectados.
"Tendremos que tomar medidas duras y poco agradables, y hoy por hoy no puedo descartar que vaya a haber despidos", declaró el presidente del Commerz, Klaus-Peter Müller, a principios de mes. La debilidad de los mercados bursátiles ha provocado que los beneficios del banco hasta junio se contrajeran un 74%, hasta los 82.361 millones de pesetas (495 millones de euros).
También el Dresdner Bank se ve capaz de descartar que se vayan a producir despidos adicionales, después de los ataques que se produjeron el 11 de septiembre en Nueva York y Washington. "Antes de los ataques hubiera dicho que los recientes recortes son definitivos. Ahora, nadie puede predecir cómo se va a desarrollar la situación en Europa", ha afirmado el presidente de la entidad, Bernd Fahrholz, en una entrevista recogida por Reuters. Hace dos semanas, la entidad financiera aumentó de 1.300 a 7.800 el número de puestos de trabajo eliminados, lo que equivaldría al 15% del total. La segunda entidad del país, el muniqués Hypovereinsbank, se encuentra en plena reestructuración tras la adquisición de Bank Austria, con el que se hizo el año pasado. La entidad tiene previsto deshacerse de 5.500 de sus 72.000 empleos hasta 2003. Deutsche ha descartado que de momento vaya a despedir a personal.
Morgan Stanley, la entidad que resultó más afectada por los atentados del día 11, despedirá a 200 empleados de su unidad de banca de inversión, según Financial Times, que afirmó ayer que el sector en EE UU va a comenzar una ola de despidos que se sumarán a los más de 25.000 que se han producido hasta la fecha.
Deutsche Bank busca aliados
en Francia
El primer banco europeo, el Deutsche Bank, está llevando a cabo una "política agresiva de búsqueda de aliados", para lo cual su "prioridad número uno" es Francia. El presidente de la entidad, Rolf Breuer, se mostró ayer así de categórico en las páginas del rotativo económico Handelsblatt, en las que afirmó que estos acuerdos se centrarían en banca de particulares.
"La expansión del Deutsche Bank se encuentra lejos de haber concluido", aseguró el directivo una semana después de haber acordado con Zurich Financial la compra de una gestora de activos en EE UU. Tras esta adquisición, el banco ha pasado a ser la cuarta gestora del mundo por volúmenes bajo gestión.
Según Breuer, el objetivo de la entidad financiera es reforzar su posición de liderazgo en Europa, sobre todo en la banca de inversión y en la corporativa.
En España, la entidad financiera alemana está sólidamente implantada. En junio de este año, la filial española ganó 2.400 millones de pesetas (14,6 millones de euros).
Actualmente tiene activos por 1,6 billones de pesetas (9.700 millones de euros) y créditos concedidos por más de un billón de pesetas. El banco también mantiene una presencia destacada en Italia, Bélgica y Polonia.