La OPEP presiona ahora para subir el precio del crudo
La OPEP acordó el pasado jueves mantener sus cuotas de producción en 23,2 millones de barriles. Aunque, eso sí, comprometiéndose a una mayor disciplina en el cumplimiento de sus recortes.
Justo después de reconocer que la desaceleración económica mundial provocará una inevitable caída de precios, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha empezado a inquietarse y a reclamar la ayuda de otras naciones, para evitar "un colapso de los precios", en palabras del secretario general de la organización, el venezolano Alí Rodríguez.
La OPEP acordó el pasado jueves mantener sus cuotas de producción en 23,2 millones de barriles. Aunque, eso sí, comprometiéndose a una mayor disciplina en el cumplimiento de sus recortes. El propio cartel reconoce que en agosto superó en unos 600.000 barriles diarios sus objetivos de producción, que entonces estaban un millón de barriles por encima de los actuales.
La perspectiva global es de recesión y con ella, de caída de la demanda. De hecho, El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha previsto para este año un crecimiento mundial del 2,6%, la tasa más baja desde 1993.
Los atentados terroristas del 11 de septiembre y sus múltiples secuelas colaterales han amortiguado los tradicionales incrementos de la demanda que se producen con la llegada del invierno en el hemisferio norte. El Centro de Estudios Globales de la Energía (CGES, en sus siglas en inglés) pronostica una caída inmediata de la demanda de combustible para aviones de entre 0,1 y 0,4 millones de barriles diarios. La demanda global de petróleo caerá este invierno a razón de 0,4 millones de barriles diarios, según los pronósticos del instituto.
Las nuevas circunstancias se reflejan claramente en las cotizaciones del crudo, que se encuentran cerca de los mínimos del año. El barril de brent, indicador en Europa, cotiza actualmente a 23,3 dólares, siete menos que el año pasado por estas fechas. El West Texas Intermediate, el de referencia en EE UU, se vende a valores similares a los del brent y cerca de un tercio por debajo de su valor del año pasado. La cesta de siete crudos de la OPEP apenas supera los 20 dólares por barril.
Un síntoma claro de la nueva situación es que, con los bajos precios actuales, las reservas de crudo de EE UU están un 9% por encima de los valores que registraban el año pasado por estas fechas. Un dato que refleja la debilidad de la demanda.
Las condiciones preocupan mucho a la OPEP, cuya producción representa el 40% de la oferta mundial y el 48% de las importaciones de petróleo de EE UU, el mayor consumidor mundial. Arabia Saudí, el mayor productor de la OPEP con 7,9 millones de barriles diarios, ha advertido ya de que la organización volverá a recortar su producción si los precios continúan a la baja.
De todos modos, el margen de maniobra de la OPEP es corto. Sus reducciones son aprovechadas por otros productores para cubrir la oferta. Por eso, abusar del movimiento es contraproducente para el cartel y de ahí la llamada a la "cooperación" de países como Rusia y México, que producen 7,1 y 3,5 millones de barriles diarios, respectivamente. Tiempos difíciles para el sector petrolero.