El gasto en infraestructuras es prioritario y sube un 10%

El Presupuesto de Gastos del Estado para 2002 asciende a 142.396,61 millones de euros (23,7 billones de pesetas), cifra que corresponde al total de gasto, tanto al destinado a las operaciones financieras, como el que generan las no financieras. El importe de estas últimas es de 112.586,93 millones de euros (18,73 billones de pesetas), lo que representa una disminución del 9,5% sobre las cifras de 2001.

Esta caída se encuentra influida por la mayor descentralización del sistema de financiación de las comunidades autónomas y la integración, dentro de dicho sistema, de la financiación de los servicios sanitarios y sociales de la Seguridad Social transferidos, haciendo no comparables ambos presupuestos, tal y como insistió ayer en reiteradas ocasiones Montoro.

Así, un año más, el gasto en infraestructuras será uno de los capítulos protagonistas, ya que supondrá en las cuentas del próximo ejercicio un desembolso de 8.710,72 millones de euros (casi 1,5 billones de pesetas), lo que representa un incremento del 10,4% sobre lo presupuestado en el presente ejercicio.

Montoro explicó que el gasto en infraestructuras vuelve a ser prioritario por su importante repercusión en la economía real, al favorecer el crecimiento y la competitividad, por su importante efecto sobre la cohesión social, la solidaridad y el Estado de bienestar.

El Ministerio de Fomento, que absorbe el 45% del gasto inversor, dispondrá el próximo año de 5.593,63 millones de euros, de los que al capítulo de inversiones corresponden 3.093,33 millones de euros (más de medio billón de pesetas), lo que supone un incremento del 6,1%. La inversión se concentra principalmente en los programas de carreteras y ferrocarriles, que acumulan un 81,1% y un 15,2%, respectivamente, del total. En concreto, se destinan 1.966,45 millones de euros a la creación de infraestructuras por carreteras, 591,26 millones a su conservación y explotación y 480,63 millones de euros al transporte por ferrocarril.

La dotación inversora para el Ministerio de Defensa (que representa el 23,1% del total) crece un 2,1% principalmente por la culminación del proceso de profesionalización de las Fuerzas Armadas y por las necesidades del mantenimiento de armamento y material.

Por su parte, Medio Ambiente, cuyas inversiones son el 17,3% del total, destinará sus recursos a infraestructuras hidráulicas y a equipamientos urbanos de saneamiento y calidad de aguas, con una dotación de 682,03 y 228,16 millones de euros respectivamente.

Otras políticas que reciben un especial esfuerzo presupuestario son justicia, educación, seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias.

Fondos europeos

En esta línea, hay que resaltar la importancia que seguirán teniendo los recursos que recibe España de la Unión Europea para cofinanciar inversiones, en el marco de los favorables resultados obtenidos en el Consejo Europeo de Berlín celebrado en marzo de 1999, en el que se fijan las perspectivas financieras para el periodo 2000-2006. En el ejercicio de 2002 le corresponderán a España para cofinanciar inversiones públicas un total de 6.529,96 millones de euros (1,08 billones de pesetas) de los fondos estructurales comunitarios y 1.502,48 millones de euros de la dotación del fondo de cohesión. Del importe conjunto de todos ellos irán destinados a la Administración central del Estado 1.916,76 millones de euros.

El esfuerzo inversor que se realiza en los primeros presupuestos expresados en euros se refleja en el aumento del 7,1% que registra el capítulo de inversiones reales en el ámbito consolidado y del 6,5% en el Estado, por encima, en cualquier caso del crecimiento previsto para el PIB nominal, establecido en el 5,9% el próximo año.

 

Aznar gana 13,3 millones de pesetas y el presidente del Tribunal Supremo, 21

Las retribuciones salariales de todos los altos cargos del Gobierno, de sus órganos consultivos y de la Administración General del Estado registrarán el próximo año una subida del 2%, equivalente a la previsión de inflación para todo el ejercicio.

Así, el presidente del Gobierno, José María Aznar, pasará a cobrar 80.060,16 euros al año (13,3 millones de pesetas), mientras el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Javier Delgado, percibirá 127.702,08 euros (más de 21 millones de pesetas), siendo el responsable público que más salario percibe de la Administración General del Estado.

El capítulo de gastos de personal del Estado asciende a 17.525,04 millones de euros (2,91 billones de pesetas), lo que pone de manifiesto un aumento en los créditos consignados en este capítulo, en relación a los que se dotaron en el año 2001 del 5,3%. No obstante, en el análisis de estos gastos conviene separar los gastos de personal activo de los haberes pasivos.

Por lo que se refiere a los primeros, reflejan con carácter general la línea de política restrictiva que se ha venido siguiendo en años anteriores. Además, la asignación de créditos a este capítulo debe contemplar el desarrollo del Pacto de Estado para la Reforma de la Justicia o la continuación de la modernización de las Fuerzas Armadas. También son partidas significativas las que se derivan de hechos puntuales como la presidencia española de la Unión Europea el primer semestre de 2002, que supondrá un gasto de 5,6 millones de euros.

 

Las aportaciones al GIF para la alta velocidad aumentan un 33,3%

La entidad pública GIF (Gestor de Infraestructuras Ferroviarias) recibirá durante el próximo ejercicio un total de 1.202,02 millones de euros (unos 200.000 millones de pesetas) para la financiación de la red de alta velocidad en construcción, lo que supone un incremento del 33,33% respecto al año 2001.

Renfe y Feve realizarán inversiones de mantenimiento de la infraestructura viaria, para lo que recibirán subvenciones de capital por 671,84 y 18,03 millones de euros, respectivamente.

Dentro del capítulo de carreteras, está prevista la ejecución de nuevos tramos de autopistas, que supondrán el cierre de itinerarios y el desarrollo de nuevos corredores en tramos con cierto grado de congestión. Para 2002 se prevén aportaciones a este sector de 150,25 millones de euros en préstamos participativos.

Por último, la política de ayudas a la vivienda apenas sufre variación respecto al presupuesto del año en curso. De hecho, la dotación que prevé Fomento para el pago de las ayudas en 2002 registra un descenso del 0,81% al pasar de 662,7 millones de euros en 2001 a 657,35 millones de euros el próximo ejercicio.

Hay que tener en cuenta que el marco anual no responde automáticamente al nuevo sistema de ayudas a la vivienda, al existir un desfase temporal entre las actuaciones que se deciden anualmente y su materialización presupuestaria, que se produce en ejercicios posteriores.