El BSCH da a conocer el lunes su nueva imagen comercial
El Banco Santander Central Hispano desvelará el lunes uno de los secretos mejor guardados desde que se anunció la integración de las marcas: el logotipo y la nueva marca de la entidad. Lo único que se sabe a ciencia cierta es que las siglas BSCH, que nunca gustaron Emilio Botín, desaparecerán definitivamente de la imagen del banco, que llevará una impronta mucho más cercana a las pretensiones de Emilio Botín, presidente único tras la salida de José María Amusátegui.
La nueva denominación, que generó considerables tensiones en el seno del banco hasta la salida de Amusátegui, supone la puesta en marcha definitiva de la unificación de las sucursales de los antiguos Santander y Central Hispano. Banesto seguirá como marca independiente, tal y como ha funcionado desde la fusión de ambas entidades.
La nueva imagen corporativa ha sido elaborada por la firma de publicidad Bassat Ogilvy y con ella se pretende que los clientes se identifiquen con un banco más moderno en el que funcionan equipos integrados y donde ya no importa el origen de los equipos (Santander o BCH).
El pasado 26 de junio, la entidad ya anunció la unificación de marcas, con la salvedad de Banesto, como colofón de su fusión y un ambicioso programa con objetivos para tres años, entre los que destaca un beneficio de 700.000 millones de pesetas (4.207,08 millones de euros) para el año 2003.
Casi tres años después de la fusión de Santander y BCH, las oficinas de ambos bancos cambiarán de imagen y las dos marcas -algo considerado desde el principio como provisional- pasarán a la historia.
Casi nadie duda de que en el nuevo logotipo predominará el nombre Santander Central Hispano, que ya aparece en la convocatoria de la presentación del lunes. Es posible que el acrónimo BSCH o SCH se siga utilizando en los casos en que haya escasez de espacio o como código para la cotización en Bolsa, pero no será el logotipo que figure en las oficinas.