El Nasdaq afronta septiembre pesimista y cerca de mínimos

Los resultados empresariales, motor de las Bolsas de EE UU durante el último año, han dado una breve tregua a los inversores. Hasta octubre no saldrán nuevas cifras. Pero no por ello mejora el sentimiento del mercado. Advertencias como la de Sun Microsystems han dejado el Nasdaq a un paso de mínimos y sumido en el pesimismo.

El 4 de abril de este año, el Nasdaq tocó el nivel más bajo de los últimos dos años y medio, 1.638 puntos. Era la temporada de presentar resultados empresariales, y las cifras mostraban que en el primer trimestre la recesión había golpeado con una dureza sin precedentes el sector tecnológico. El Nasdaq caía un 67,5% desde los máximos, marcados hacía un año y 20 días.

Según terminaba la temporada de resultados, cundió la opinión de que lo peor podía haber pasado. El Nasdaq subió un 40% en un mes y medio. Volvió a retroceder, aunque poco, con los resultados del primer semestre. Hasta que en las últimas sesiones de verano se ha acercado peligrosamente a la zona de mínimos. El índice está a un 9% del nivel más bajo del año.

La mitad de los valores del Nasdaq 100 (los más representativos de la nueva economía) ha caído desde que el índice marcase mínimos del año. Un 19% ha bajado más de un 25%, con retrocesos de calado como el de Exodus (-85%), At Home (-85%)o JDS Uniphase (-54%).

Todo eso sin que haya habido números que llevarse a la boca. Lo que lastra el mercado hoy por hoy es el pesimismo.El temor a que los resultados del tercer trimestre, que se presentarán a partir de octubre, no den una de arena, sino otra más de cal. Se cumpliría, así, un año de resultados empresariales pésimos.

Las dudas que marcaban el verano se convirtieron en abierto pesimismo por obra de Sun Microsystems. La empresa dijo que rondará las pérdidas en el ejercicio. Además, inyectó una dosis de problemática de nuevo cuño al asegurar que lo que peor marcha es el mercado europeo y el japonés. En el estadounidense, se da por hecho que hay crisis tecnológica. Pero no había constancia de que la situación en el resto del mundo fuese tan grave.

En esta ocasión, el golpe ha dolido más porque la semana pasada Cisco había insuflado algo de optimismo, al asegurar que está reestructurando el negocio y que responderá a las expectativas en el tercer trimestre del año.

Otro elemento que hizo al Nasdaq regresar a zona de mínimos fue el mal dato de confianza del consumidor, publicado el martes. Si la caída bursátil hace que las familias estadounidenses moderen su ritmo de consumo, la crisis puede agravarse. Así, esta semana el Dow Jones cayó por debajo de los 10.000 puntos por primera vez desde el 12 de abril.

Tal y como está el mercado, ningún análisis puede venderse como válido. Sobre todo en el sector de la tecnología, que es el que más sufre el cambio de ciclo. De ahí que se dé tanta importancia a cifras macroeconómicas o a las previsiones de beneficio de las empresas. No por los propios números, sino porque pueden marcar tendencia.

Subidas

Hay, de todas maneras, valores que no sólo repuntaron después de mínimos, sino que han aguantado en los peores momentos. 10 empresas que forman parte del Nasdaq 100 han ganado más del 50% desde mínimos, y casi una tercera parte, más de un 25%.

El valor más afortunado en este rebote ha sido RF Micro Devices, que ha escalado el 180% desde el 4 de abril, o la casa de subastas por la red Ebay, con otro 80%. Asimismo, el sector biotecnológico se ha comportado bien. El índice especializado dentro del Nasdaq ha ganado un 30% desde el mínimo del mercado, y dos biotecnológicas (Idec Pharmaceuticals y Abgenix) se han colado entre los 10 mejores del Nasdaq 100 al subir alrededor del 58%.

La biotecnología, de todas maneras, sigue un ciclo diferente al del resto del mercado. En el Nasdaq de tecnología e Internet, el de toda la vida, los inversores están a la expectativa y, si acaso, se dedican con sumo cuidado a operar intradía. La gran mayoría prefiere esperar tiempos mejores.

 

Terra vuelve a perder los ocho euros

Terra es al inversor español lo que el Nasdaq al estadounidense. Por lo que representó en términos de ganancias fáciles y rápidas, popularización de la Bolsa y exuberancia irracional. También en lo severo de una caída que ha superado todas las expectativas.

La filial de Telefónica ha caído un 94,5% desde que el 25 de febrero de 2000 cerrase en 139,75 euros. Se llegaron a cruzar operaciones a 157,65 euros por acción. Cayó hasta siete euros, marcados el pasado 25 de julio. La empresa española marcó el mínimo más tarde que el Nasdaq porque, aunque siempre pagaba muy caras las sesiones en las que la tecnología bajaba en Wall Street, no recogió sus avances. Igual que sucedió con otros valores en Europa.

Además, Terra se apuntó a la crisis argentina que, visto lo flaco de las cuentas del portal de Internet, tampoco podía causar grandes estragos en beneficios. Pero el mercado tenía a Terra entre ceja y ceja, y los amagos de devaluación del peso causaron tantas pérdidas como algunos de los retrocesos del Nasdaq.

Posteriormente vino la recuperación, durante la cual Terra avanzó un 32% en apenas siete jornadas. El valor aguantó, con el beneplácito del Nasdaq, varias sesiones en la zona de los ocho euros. Pero, como no podía ser de otra manera, cuando las cosas se complicaron la acción perdió pie. El jueves Terra cerró con una caída del 4,88%, entre las 10 mayores del año, después de ganar posiciones durante la mañana.

Los analistas, que hace tiempo que dejaron de hablar de buscar gangas o tomar posiciones arriesgadas a largo plazo, prefieren ahora hacer cálculos sobre cuándo la empresa ganará dinero.