Delphi negocia con cinco empresas la venta de dos fábricas en España
El grupo estadounidense Delphi Automotive Systems iniciará en septiembre las negociaciones para la venta de sus fábricas de componentes para el automóvil en Agoncillo (Logroño) y Pedrola (Zaragoza), con una plantilla de 578 y 45 trabajadores, respectivamente. La operación llevará aparejada una tercera planta en Portugal, que tiene la misma denominación social que las españolas.
Delphi enmarca la venta de las fábricas, dedicadas básicamente a la producción de paneles de instrumentos y parachoques, en el plan de revisión de la cartera de negocios y la estrategia global a largo plazo emprendidos por la multinacional estadounidense para racionalizar su producción.
Según se puso de manifiesto en una reunión celebrada ayer entre el Gobierno de La Rioja y CC OO, cinco grandes grupos del sector de componentes automovilísticos han mostrado interés por hacerse con las fábricas en venta. Fuentes del mercado apuntan hacia el grupo francés Valeo y la canadiense Magna como principales candidatos a la compra.
El presidente del Ejecutivo autonómico, Pedro Sanz, ha subrayado que su Gobierno "influirá, en la medida de sus fuerzas, para lograr el mantenimiento de los puestos de trabajo". La situación de la planta riojana se ha complicado con el expediente de regulación de empleo de la fábrica de Opel España en Figueruelas (Zaragoza), a la que destina casi el 70% de su producción.
Preocupación
Medios sindicales han expresado su preocupación por esta coincidencia, ya que los recortes productivos impuestos por la paralización de la planta zaragozana de Figueruelas podrían suponer una merma en la capacidad financiera de la fábrica riojana.
De hecho, la dirección de Delphi ha manifestado ante la Inspección de Trabajo su impresión de que las ventas de este año serán bastante inferiores a las de anteriores ejercicios, lo que repercutirá en el volumen de ganancias. Sin embargo, los sindicatos han denunciado que se están haciendo horas extra en la fábrica y aún puede potenciar su capacidad productiva.
Ayer, el Ministerio de Trabajo devolvió, por un supuesto defecto de forma, el expediente de regulación temporal de empleo planteado por la planta riojana de Delphi, a raíz del planteado en Aragón, y que afectaría a 350 de los 578 trabajadores de la fábrica durante un periodo de 14 días. Delphi alega que la paralización de Opel en Zaragoza supondrá para su planta pérdidas en ventas de unos 565 millones de pesetas (3,4 millones de euros).
El secretario general de CC OO en La Rioja, Jesús Cámara, ha pedido al Gobierno autónomo que revise el expediente de regulación que Delphi se propone aplicar a partir de septiembre. Para el dirigente sindical, "la empresa debe abonar a los trabajadores el montante económico para complementar el 100% de sus salarios y los trabajadores eventuales y los mayores de 55 años deben quedar excluidos de la regulación".
Cámara subraya que "tal como está planteado, el expediente hace recaer el peso de la regulación exclusivamente sobre los trabajadores, en tanto que la empresa lo utiliza con una finalidad estrictamente económica, para sanear la cuenta de resultados. Además, la cifra de pérdidas aportada por la empresa ha sido notablemente engordada y aceptar su planteamiento es tanto como reconocer que, si Opel se cerrara, habría que adoptar una medida idéntica para Delphi en Logroño".
La paralización de Opel afecta también a otras seis empresas de La Rioja, proveedores de Figueruelas. Se trata de Caucho Metal Productos, Contitech Elastorsa, Klear Corporation, Metzeler Automotive, Norton Perfomance y Rioglass, aunque ninguna ha recurrido, de momento, a la regulación de empleo. La mayoría ha emprendido un proceso de captación de nuevos clientes, para asegurar su diversificación.