La red de oficinas de las cajas supera ya por 3.250 a la de los bancos
La red de oficinas de cajas y bancos ha crecido en casi 5.000 durante la última década. Pero este crecimiento se debe en exclusiva al afán expansivo de las cajas de ahorro, que han aumentado un 40,9% el número de puntos de venta en este periodo, frente al cierre de 808 oficinas de los bancos. El resultado ha sido que la red de cajas es ya más amplia que la de los bancos, con una diferencia de 3.250 sucursales.
La diferencia de tamaño entre la red de las cajas de ahorro y la de los bancos se ha hecho cada vez mayor desde 1998. Entonces, la red de cajas superaba por primera vez a la de los bancos, por una diferencia de sólo cinco oficinas (17.593 oficinas las cajas y 17.588 los bancos). Pero el fuerte ritmo de expansión de las cajas fuera de sus territorios de origen, su empuje para captar más cuota de mercado y la apuesta de los bancos por otros canales de venta, como Internet, han cambiado completamente el panorama en tan sólo tres años. El resultado es una diferencia actual de 3.250 oficinas (casi un 17% más) a favor de las entidades de ahorro.
En total, cajas y bancos disponen de 35.307 sucursales, 4.787 más de las que había en 1990. Las cajas han ampliado su red 5.595 sucursales. Los bancos, por el contrario, tienen actualmente 808 oficinas menos que a principios de la década de los noventa, cuando tenían 16.835 sucursales abiertas. Actualmente, disponen de sólo 16.027, lo que supone una reducción de 5,8%.
Este progresivo reajuste no se ha producido de una forma lineal. Los bancos han combinado etapas en las que la red de oficinas ha sufrido un proceso de expansión (1990-1993; 1995) con otros ejercicios en los que la necesidad de recortar gastos obligó al cierre de oficinas. Aun así, el número de sucursales bancarias en España sigue siendo muy alto. No en vano, nuestro país ha sido durante años el más bancarizado de toda la UE. Las cajas de ahorro, por el contrario, han experimentado un crecimiento sostenido desde 1990.
El pasado ejercicio, por ejemplo, constituye una buena muestra de lo que ha sido la tónica general en los últimos años: las cajas abrieron 932 oficinas, mientras que los bancos siguieron el camino inverso y cerraron 921. Este afán expansivo de las cajas de ahorro, es lo que ha hecho que el número de sucursales sólo haya descendido en 52 en el último año. En cambio, la contracción en el número de puntos de venta de bancos se ha repetido por tercer año consecutivo.
Este descenso del número de oficinas bancarias se ha producido, fundamentalmente, a causa de la política seguida por las dos entidades financieras que disponen de las mayores redes, el BSCH y el BBVA, que intentan reducir gastos a toda costa. Durante el pasado ejercicio, el primero cerró 418 oficinas sólo en el territorio español de un total de 3.894; el BBVA, 472 sucursales de 4.336.
La política seguida por los dos grandes contrasta con la de otras entidades como el Banco Popular, que sigue apostando por la expansión geográfica, con 188 nuevas oficinas desde 1996.