Volkswagen replantea la continuidad de Seat como marca
El grupo de automoción Volkswagen calificó ayer de "rumor" la información que circula en la prensa alemana sobre una posible reestructuración de la filial española Seat, que podría ir desde la absorción a la desaparición de la marca. La preocupación por el futuro de la marca Seat se debe a las declaraciones que a principios de mes efectuó el presidente de Volkswagen, Ferdinand Piëch, en la revista Manager Magazin.
El semanario germano afirmaba que el directivo de Volkswagen "había dado carta blanca" al presidente de Seat, Bernd Pischetsrieder, para que reorganizara la filial del grupo.
Piëch apunta varios cambios posibles, desde una reducción de los modelos más potentes de Seat, hasta la desaparición de la marca. Otra opción posible dentro de la reestructuración es la absorción de la marca española dentro de Volkswagen.
Bernd Pischetsrieder es un claro candidato a sustituir a Piëch en la presidencia del grupo en abril de 2002. Manager Magazin agrega que Pischetsrieder no desea que se repita la experiencia de la británica Rover, que le costó el puesto cuando era presidente de BMW, y que querría cerrar la crisis de la filial española antes de la próxima primavera.
Pischetsrieder ha señalado en más de una ocasión que Seat aún vivirá "tres o cuatro años difíciles". En concreto, en la última presentación de resultados de la filial española el presidente de la compañía criticó "la falta de carácter" de la marca y señaló que la solución no puede estar en lanzar nuevos modelos, sino en crear "una familia de productos".
El año pasado Seat vendió 765.000 coches, apenas un 1,8% más que en 1999. Respecto a 2001 las ventas disminuyeron un 5,2% durante el primer semestre, situándose en 264.000 vehículos entregados.
El portavoz de Volkswagen también declinó comentar a Efe si el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, había solicitado una reunión con Piëch para hablar de las perspectivas de la filial española, tal y como se ha informado en algunos medios.