El FMI descarta un contagio masivo de la crisis argentina a otros países
El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirma que las posibilidades de un contagio masivo de la crisis argentina quedan lejos de las de anteriores crisis. Esa buena noticia para los mercados internacionales puede resultar fatal para el país, que confía en obtener hoy nuevas ayudas del organismo por unos 6.840 millones de euros para apuntalar su sistema financiero.
En su informe trimestral sobre La financiación de los mercados emergentes, el FMI reconoce que la desaceleración mundial ha deteriorado las perspectivas de estos países para los próximos meses y que su desarrollo dependerá en gran medida de la evolución de las crisis argentina y turca.
El organismo sostiene que, aunque los riesgos de contagio permanecen, la situación dista mucho de las de la crisis asiática de 1997 y rusa de 1998. Salvo Brasil, que se ha visto golpeado por los problemas de Argentina, los demás países -en especial México y Rusia- han servido de refugio para los inversores.
"Este aspecto marca una diferencia radical respecto a otras crisis, cuando los inversores abandonaron por completo estos mercados [los emergentes]", asegura.
No obstante, el FMI admite que aún no se han producido episodios de suspensión de pagos o fuga masiva de capitales como para poder evaluar el alcance y el grado de contagio a los demás países.
Situación límite
æpermil;sa es la amenaza que se cierne sobre Argentina, pese a la insistente negativa del Gobierno. De hecho, una encuesta de Reuters sitúa en el 45% las posibilidades de que Argentina suspenda pagos o devalúe su moneda este año.
Asimismo, los analistas muestran su preocupación por la lenta, pero constante, retirada de depósitos. El Gobierno que preside Fernando de la Rúa es consciente de que el sistema financiero no puede soportar indefinidamente esta situación. En julio, los depósitos se redujeron un 8% y la retirada media de fondos en lo que va de mes se cifra en 300 millones de dólares diarios.
De ahí la urgencia del Gobierno por obtener nuevas ayudas del FMI para respaldar al sector financiero. El Ejecutivo daba ayer casi por hecho que obtendrá entre 6.840 y 10.260 millones de euros del organismo, pero en Washington no les cuadran las cuentas que les ha presentado el ministro de Economía, Domingo Cavallo. La fecha límite para que el organismo tome una decisión cumple hoy.
Ante la grave falta de liquidez, Cavallo anunció el martes que admitirá bonos públicos para el pago de impuestos con el objetivo de alentar la demanda de títulos públicos y mejorar así la recaudación, de cuya evolución depende el éxito del plan de ajuste. Estos anuncios redujeron ayer el riesgo-país por debajo de 1.500 puntos.