Un fallo da la invalidez absoluta a una empleada que sufre fobia laboral
La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha confirmado una sentencia que otorga la invalidez permanente absoluta a una mujer, empleada en una fábrica de calzado, a la que se le diagnosticó una neurosis fóbica que le provoca una "continua ansiedad, con conducta de evitación que limita su capacidad de actuación frente a situaciones ordinarias del día a día".
La sentencia fue recurrida por el Instituto Nacional de la Seguridad Social, por considerar que la demandante está capacitada para cuidar a su hijo de 11 años de edad. El tribunal señala que "una cosa es que pueda atender a las necesidades ordinarias de su hijo, y otra diferente, que esté en condiciones de responder a otro tipo de exigencias derivadas de situaciones imprevistas o que requieren de algún tipo de iniciativa o toma de decisión".
La sentencia, que desestima el recurso presentado por el instituto, confirma el fallo emitido en 1998, por el que la trabajadora obtuvo la invalidez permanente absoluta con derecho a una pensión mensual del cien por cien de su base reguladora más los incrementos y revalorizaciones legales correspondientes.
La mujer fue declarada en octubre de 1986 "afecta de una incapacidad permanente absoluta para todo tipo de trabajo con el diagnóstico de neurosis fóbica". La demandante recurrió y presentó un cuadro clínico de "trastorno fóbico de componente agorafóbico".
El tribunal considera que de los hechos probados se desprende que la mujer posee una incapacidad permanente absoluta y que su situación no ha mejorado desde que obtuvo tal declaración en 1986, por lo que señala que "resulta obvio que no está en condiciones de realizar las tareas propias de ninguna profesión u oficio con el mínimo de rendimiento, capacidad y profesionalidad que se exige en la prestación de servicios por cuenta ajena y que no ha mejorado en nada respecto de su situación anterior que determinó que fuera declarada afecta de incapacidad".