Un grupo de cajas entrará en Mobipay con el 20% del capital
Las negociaciones para cerrar el accionariado de Mobipay, la plataforma conjunta de pago por móvil promovida por el BSCH y el BBVA, están pendientes de los últimos flecos. Una docena de cajas de ahorros entrará en el capital tomando una participación del 20%. Para facilitar esta entrada, los dos grandes bancos reducirán un 2% su presencia, hasta el 8%.
Las cajas de ahorros tendrán una presencia mayoritaria en el núcleo de accionistas de Mobipay, la plataforma tecnológica fruto de la fusión de las que ya tenían el BBVA y Telefónica (Movilpago) y el BSCH y Airtel (Pagomóvil). Una docena cajas tomará participaciones de en torno al 2% hasta agrupar un 20% del capital, con lo que formarán un bloque mayoritario.
Entre las entidades de ahorro que se han interesado por acceder a la plataforma se encontrarían Bancaja, la BBK, CAM, Ibercaja, Caja Duero y Caja España, entre otras.
Para facilitar la entrada de las cajas en el capital, tanto los bancos que ya habían confirmado su participación como las tres redes de medios de pago han cedido un porcentaje de su participación. El BBVA y el BSCH la han reducido un 2% cada uno, con lo que contarán con el 8%, según fuentes conocedoras de la negociación.
Otros dos accionistas, el Banco Popular y Caja Madrid, reducen un 1% su porcentaje y cada uno controlará un 4%. El Banco Sabadell, en un principio, también declaró que iba a tomar parte en este proyecto conjunto, aunque en el nuevo esquema no queda clara su posición.
Las tres sociedades de medios de pago, Euro 6000 (integrada por cajas de ahorros), 4B y Sermepa (controlada en un 42% por Visa España), también disminuirán su participación en un punto y contarán cada una con un 4%. Sermepa y 4B anunciaron hace una semana su incorporación a la plataforma.
Así, la tarta accionarial de Mobipay quedará formada de la siguiente forma: un 40% estará en manos de las tres operadoras de telefonía móvil, Telefónica (15%), Airtel (15%) y Amena (10%), a la espera de que entre Xfera, el operador de telefonía de tercera generación; otro 20% para las cajas de ahorros; un 16% que sumarían el BBVA y el BSCH; mientras que un 12% estaría controlado por las tres empresas de medios de pago.
Faltaría un bloque del 12% sin cerrar aún en el que entrarían Caja Madrid y el Popular, cada uno con un 4%. El 4% restante quedaría en el aire. Si bien la negociación se cerrará en breve.
Desde que el BBVA y el BSCH acordaron unir sus dos plataformas tecnológicas el pasado 30 de mayo, se reservaba en torno a un 5% -que ahora se quedaría en un 4%- para La Caixa. Pero esta entidad ha vuelto a decir no a aportar capital a Mobipay, aunque se reserva la posibilidad de utilizar esta tecnología, distinta a la de Caixamóvil. Aunque los accionistas de Mobipay creen firmemente que la única salida de La Caixa es participar, para evitar las dificultades de operar con tecnologías distintas.
Otra caja catalana, Caixa Catalunya, también ha rechazado entrar en el accionariado, que requerirá una inversión de unos 4.000 millones de pesetas.
Ahora hay dos sistemas de pago por móvil operativos, el de La Caixa y el de Deutsche Bank (Paybox). El pago por este canal se configura como un mercado muy apetitoso con 25 millones de clientes potenciales, los usuarios del teléfono móvil. Sin embargo, la falta de un proyecto comercial bloquea el éxito de este método de pago. Así lo reconocen algunos de los propios accionistas de Mobipay.
A cinco meses de que la tecnología esté lista, las entidades financieras y las operadoras no saben cómo van a lograr que sus clientes se acostumbren a pagar con el móvil. Todavía pesa el reciente fracaso del monedero electrónico.