Psion sube un 18% tras abandonar el negocio de agendas electrónicas
La británica Psion, rival de Palm en el negocio de las agendas electrónicas, se anotó ayer en la Bolsa de Londres un 18%, tras anunciar la víspera que abandona la fabricación de este producto, que representaba un tercio de sus ingresos. Psion centrará a partir de ahora sus esfuerzos en la comercialización de programas informáticos educativos y la venta de derechos de propiedad intelectual a otras compañías del sector. El valor había cedido un 36% en el último mes. Desde el máximo histórico la firma cae el 94%.
La compañía justificó su decisión en la caída de la demanda en Europa y las dificultades para mantener los beneficios en un negocio muy competitivo dominado por las compañías estadounidenses. La británica, no obstante, aseguró que los actuales productos que tiene en catálogo continuarían a la venta y confirmó que, a pesar de la caída de la demanda, espera beneficio operativo en trimestre.
El coste de la reestructuración que pretende llevar a cabo Psion es de 8.000 millones de pesetas y supondrá un recorte de 250 puestos de trabajo. Los analistas consideraron acertada la decisión de la británica, que pasaba apuros financieros, para poder competir con garantías en el negocio del gran consumo.