Los olivareros prevén perder este año 100.000 millones por exceso de producción
La Organización Común de Mercado del Aceite de Oliva garantiza una cantidad de aceite producida en España cada año de 760.00 toneladas, cifra absolutamente insuficiente para cubrir las expectativas productivas, presentes y futuras, del olivar español. Así, sólo en la campaña 1999/2000, afectada por unas condiciones climatológicas adversas, pues coincidió con una importante sequía en nuestro país, los productores lograron cobrar la ayuda íntegra: 220 pesetas por kilo, ya que la producción fue de 747.000 toneladas, 13.000 menos de la cantidad garantizada.
Sin embargo, las cosechas de los años anteriores y posteriores (la reforma de la OCM, que recientemente ha sido prorrogada por otros tres años, entró en vigor en 1998) no fueron similares. La primera cosecha recogida con la nueva OCM provocó a los aceituneros españoles pérdidas por valor de 30.792 millones de pesetas, según COAG. Esta misma asociación estima para la campaña actual, tercera con la nueva OCM, unas pérdidas de 66.800 millones de pesetas.
Las cuentas de Upa aluden a una pérdida de renta de los aceituneros de un 34% en 2000 y de un 25% en 2001. Este sindicato concluye que las pérdidas por penalizaciones (a las que habría que unir el dinero dejado de percibir por la caída de los precios) serían de 100.000 millones de pesetas en la campaña 2000/01.
Las previsiones de recolección para esta etapa son de 965.000 toneladas cantidad que al superar ampliamente a la garantizada, provocará que las ayudas caigan a las 153 pesetas kilo desde las 220 pesetas kilo. Esta previsión es también compartida por la Consejería de Agricultura de Andalucía, principal región productora, que calcula penalizaciones entre 150 y 155 pesetas.
La rentabilidad de las explotaciones es cada día más dudosa. El umbral de rentabilidad de un olivar es de 400 kilos de aceite por hectárea. Pues bien, un 40% de las explotaciones olivareras españolas está por debajo de esa cantidad. Además, entre los 400 y los 600 kilos de aceite por hectárea, cifras que comienzan a identificarse con la rentabilidad, aunque tampoco la garanticen plenamente, se encuentra otro 30% de explotaciones olivareras. El sector, por tanto, cree que sólo un 30% de los olivares españoles posee pleno rendimiento y rentabilidad.