El BCE descarta bajar tipos a pesar del deterioro del clima económico
Inflación
Durante su discurso explicó que "2000 fue un año excelente para los países de la zona euro, que experimentaron un gran crecimiento, con altas tasas de creación de empleo, pese a la depreciación del euro". Tras asegurar que "la estabilidad de precios se tiene que mantener a medio plazo", dijo que el BCE estará "vigilante" para que así sea, en especial debido a la próxima puesta en circulación de la moneda única, el 1 de enero de 2002. Duisenberg hizo un especial llamamiento a los Gobiernos y a las empresas para que controlen la situación de los precios cuando circule la moneda única, de tal forma que no se tienda a un "redondeo" al alza que perjudique a los consumidores.
Aseguró que los preparativos para la circulación del euro "van por buen camino" y anunció que a final de junio de 2001 el total de billetes fabricados ascendía ya a nueve billones de unidades, lo que representa el 90% del stock previsto para la fase inicial.
Por otra parte, descartó de nuevo que tenga intención de abandonar su cargo y dimitir antes de que concluya su mandato de ocho años, en 2006.
"Sí, me voy a quedar", dijo, desmintiendo los rumores sobre su posible dimisión, que algunos medios situaban a mediados de 2002, una vez concluida la transición de las monedas nacionales a euros, para que su puesto fuera ocupado por un francés.
El consumo sigue fuerte, según el Banco de España
En España la desaceleración económica continúa aunque se mantiene el perfil de suave aterrizaje. Incluso el Banco de España ha constado una ligera mejoría del consumo privado en el segundo trimestre del año, similar a la producida ya en el primer trimestre, según resalta en su boletín económico de junio.
"Los indicadores relativos al consumo privado muestran, en general, que la desaceleración que les caracterizó desde el segundo semestre del año 2000 no se han agudizado y algunos, incluso, reflejan mejoras en su comportamiento", señala.
La autoridad monetaria resalta también un "relativo fortalecimiento" de los indicadores de consumos intermedios en la construcción, mientras que los de empleo han mantenido ritmos de crecimiento elevados. No ocurre lo mismo con la producción industrial, que ha iniciado el segundo trimestre del año "intensificando la desaceleración". El Gobierno confía en que el PIB crezca un 3,2% este año.
El Banco de España también hace referencia al comportamiento de la inflación y al aumento salarial en la negociación colectiva, constatando que el efecto sobre la subida salarial del año 2000 -con aplicación en 2001- derivado de las cláusulas de salvaguarda sigue cifrado en seis décimas.