Accionistas de Solac impugnarán la ampliación de 4.250 millones
Accionistas minoritarios de Solac, que aglutinan el 1,3%, impugnarán la ampliación de capital de 4.250 millones de pesetas lanzada por Cegasa, que controla el 98,7% a través de la sociedad instrumental Azpillaga 2000. La inyección de fondos diseñada por el nuevo propietario consiste en su mayor parte en la aportación de créditos.
Cegasa sumará una nue-va impugnación a sus planes para Solac. Los accionistas minoritarios, que controlan el 1,3% del fabricante alavés de pequeños electrodomésticos, ya habían impugnado ante el juez otra operación: el convenio de acreedores firmado el 2 de noviembre de 2000 que incluía quitas del 70% sobre una deu-da total de 4.500 millones de pesetas (27,05 millones de euros).
Mientras este recurso si-gue pendiente de resolución, el citado grupo de inversores vuelve ahora a la carga y presenta un nuevo veto a Cegasa. Una vez que presenten la impugnación, el juez también deberá tomar una decisión en este caso que puede alterar los planes del fabricante vas-co de pilas y bombillas para Solac.
Cegasa ha puesto en marcha una ampliación de capital en Solac por una cuantía de 4.250 millones de pesetas para completar el saneamiento financiero de la compañía, que tiene un balance agujereado por las pérdidas acumuladas de 4.417 millones de los últimos ejercicios.
Esta inyección de fondos fue aprobada por la junta de accionistas celebrada el pasado 25 de junio en una notaría de Vitoria, con los votos a favor de Azpillaga 2000, la sociedad instrumental de Cegasa, que controla el 98,7% del capital.
Según un informe del administrador único de Solac, sustituido en la gerencia por un consejo de administración nombrado en la junta, la ampliación tiene tres fases. La primera reduce a cero el capital de 614 millones de pesetas (3,69 millones de euros) para luego realizar la citada inyección.
En el informe del administrador único, Solac reconoce un patrimonio negativo de 4.229 millones, "una situación que no puede prolongarse por más tiempo", según admite. Además, califica de "elevadísimo" el endeudamiento financiero, ya que supera 4.500 millones de pesetas (27,05 millones de euros), la mayoría de los cuales, por una cuantía de 3.208 millones de pesetas (19,28 millones de euros), tiene como garantía activos del fabricante de electrodomésticos.
Aportación de créditos
Pese a la inmediatez que sugiere el informe, la ampliación se divide en dos. El 60% por aportación de créditos adquiridos por Azpillaga 2000. En concreto son préstamos por 2.156 millones (12,96 millones de euros). Y es en la segunda fase de la operación cuando llega un desembolso en metálico, el del 40% restante, aunque a pagar en un plazo de cinco años.
Entonces, si para enjugar el citado patrimonio negativo de 4.229 millones, Solac necesita la totalidad de la ampliación de 4.250 millones, el balance no queda saneado con esa primera parte del 60%, y menos si el 40%, que ya consiste en aportaciones en metálico, alarga la posibilidad de pago durante un lustro.
Por otro lado, el nuevo consejo de administración de la industria alavesa estará integrado por un mínimo de tres miembros y un máximo de cinco, según respaldó la junta celebrada en Vitoria.
Los créditos que Azpillaga 2000 aportará al capital de Solac proceden del grupo de entidades financieras que quedaron atrapadas por la crisis de la empresa de línea blanca, que suspendió pagos en marzo de 1999 con un pasivo global de 9.000 millones de pesetas (54,09 millones de euros). En aquella larga lista de acreedores está casi todo el sector financiero.
Además de los préstamos más importantes, ahora en manos de Cegasa a través de su instrumental, hay otra quincena de entidades que también los subrogaron a favor de esa sociedad. En muchos casos por separado, la deuda ronda el centenar de millones de pesetas. Por ejemplo, Banco Sabadell con 99 millones de pesetas (600.000 euros), al igual que Banco Zaragozano. Otros están un poco por debajo, como el antiguo BBV con 97 millones de pesetas (580.000 euros) o el Banco Herrero (85 millones de pesetas, 510.000 euros) y el Banco Urquijo (82 millones de pesetas, 490.000 euros).
El saneamiento financiero de Solac fue provocado por una decisión judicial que redujo el activo 3.600 millones de pesetas (21,64 millones de euros).
Plan de Cegasa para recuperar el nivel de ventas
Cegasa aspira a recuperar un cierto nivel de ventas para Solac, que cuando era uno de los líderes del sector nacional de pequeños electrodomésticos facturaba unos 14.000 millones de pesetas (84,14 millones de euros) al año. El ejercicio pasado, según sus responsables, ingresó tan sólo 1.200 millones de pesetas (7,21 millones), y en 2001 aspira a multiplicar por cinco esa base y llegar a los 6.000 millones de pesetas (36,06 millones de euros). El nuevo propietario ha aportado su red comercial para facilitar la recuperación de Solac, que durante la crisis ha cedido mercado a sus competidores, como Taurus.
Por otro lado, las entidades financieras, que han recuperado menos del 30% del total de préstamos concedidos a Solac, declararán como minusvalía ante la Hacienda correspondiente esa morosidad no resuelta. Como ejemplo del coste de la crisis de Solac para el sector financiero, una deuda acumulada de casi 1.000 millones de pesetas (seis millones de euros), asumida por Deutsche Bank, BNP, Bancaja, Santander, Central Hispano, Banesto y Vitoria, se ha quedado en un pago final de 75 millones de pesetas (450.759 euros).