Cinco empresas se unen para la depuración de purines
La asociación ADAP, formada por cinco empresas españolas dedicadas a la investigación medioambiental, construirá 17 nuevas plantas de depuración de purines, con una inversión de 42.500 millones de pesetas (255,43 millones de euros), que se unirán a las 13 que ya se encuentran en funcionamiento o en construcción.
La existencia de más de 40 millones de toneladas anuales de purines en España ha impulsado a ADAP (Asociación de Empresas para el Desimpacto Ambiental de los Purines) a proyectar nuevas plantas de depuración de purines, los excrementos sólidos, líquidos, aguas residuales y restos de comida generados en las granjas porcinas.
La mayoría de las instalaciones se construirán -en un plazo que no especificó- en las comunidades autónomas de Cataluña y Castilla-La Mancha, las zonas más afectadas.
Las plantas de tratamiento, que convierten los residuos de porcino en abono o en energía eléctrica mediante diversos procesos, depurarán 1,5 millones de toneladas de residuos y coparán el 90% del mercado español.
ADAP está formada por las empresas catalanas Corporación AGE y Ros Roca, las madrileñas Sener Grupo de Ingeniería y Sinae Energía y Medio Ambiente y la vasca Guascor Explotaciones Energéticas. ADAP tiene una facturación agregada anual de 110.000 millones de pesetas (661 millones de euros).
El presidente de ADAP, Jaime Beleta, reconoció ayer la dificultad de realizar esta actividad por la "escasez" de infraestructuras en las zonas en las que se instalan las plantas, en su gran mayoría rurales, y por el elevado coste del gas natural y de la energía eléctrica utilizada en los procesos de depuración de los residuos.
Beleta también aseguró que "los problemas de suministro" y "distribución de gas natural paralizan algunos proyectos", hecho que justificaría la creación de un gasoducto en zonas cercanas a plantas de tratamiento.
Escasa rentabilidad
ADAP asegura que la rentabilidad de las instalaciones es muy "escasa" y que tan sólo se plantea en un plazo de 15 años, cuando el rendimiento financiero se estima entre un 8% y un 9%.
Tradicionalmente los purines se almacenan y se vierten en terrenos de cultivo. La problemática se genera si la cantidad de vertido en una zona es superior a la que el terreno puede absorber. En este momento se puede originar un exceso de nutrientes o una contaminación por nitratos de los acuíferos. Se considera que la cantidad de estiércol aplicado en una zona no puede superar anualmente 210 kilos de nitrógeno por hectárea. Las plantas se encuentran situadas en comarcas donde la concentración de ganado porcino dificulta el vertido a terrenos para su fertilización.
La asociación, constituida en noviembre de 2000, nació con el objetivo de "dar respuesta a la problemática ambiental" que generan los purines y "para resolver de forma conjunta los problemas que se plantean al aplicar estas soluciones", según Beleta.
Beleta se muestra favorable a la incorporación de nuevos socios, aunque asegura que las empresas que deseen formar parte de ADAP "tienen un listón muy alto", ya que han de cumplir unos requerimientos ambientales.