La caída de beneficios en valores del Nasdaq tira a la baja del Ibex
Vuelve la volatilidad. La Bolsa vivió ayer una jornada de nervios en la que el índice llegó a perder un 2,5% una hora antes del cierre. Al final de la sesión, la caída se quedó en un 1,2%. Detrás de este vaivén, motivado por una mala apertura del Nasdaq y que afectó también al resto de plazas europeas, se esconde el nerviosismo por unos resultados empresariales del segundo trimestre que no prometen ser muy buenos. En el cómputo semanal, el Ibex retrocedió un 2,54%.
El bálsamo que la Reserva Federal aplicó a los mercados a través de sucesivos recortes de tipos parece haber perdido su efecto. Los movimientos bruscos en los índices y el pánico vendedor en el sector tecnológico se han vuelto a instalar en la Bolsa. Ayer, además, el zigzag se vio amplificado por el vencimiento simultáneo de los contratos de futuros y opciones, que animó los volúmenes de negocio tras cuatro jornadas de sequía.
Pero lo que más preocupa ahora en el universo de la renta variable son los resultados de las empresas en el segundo trimestre. El pesimismo va en aumento, sobre todo después de la advertencia de Nokia el martes y las últimas de JDS Uniphase, McDonald's, ST Microelectronics y la canadiense Nortel Networks.
Con este nuevo escenario de máxima cautela, el grupo Telefónica se está llevando en España todos los palos. La matriz perdió ayer un 3,16% y cierra la semana con un retroceso del 5,7%. La operadora no ha podido esquivar la oleada de ventas sobre los valores de telecomunicaciones en toda Europa. Aunque su filial de Internet lo ha hecho incluso peor.
Terra registró una semana nefasta en que el valor ha perdido un 9,57%, incluso más que Picking Pack (-9,48%), una compañía que será expulsada del Ibex a finales de mes. Con el precio alcanzado ayer, los 8,5 euros, Terra toca el nivel más bajo de su historia y se sitúa un 28% por debajo del precio de la OPV.
En el mal comportamiento de la Bolsa también refleja la incertidumbre económica. Muchas de las ganancias acumuladas durante los meses de abril y mayo se debieron tanto a los recortes de tipos de interés llevados a cabo en EE UU como por la esperanza de una pronta mejora de las cifras macroeconómicas.
Sin embargo, cada vez se retrasa más el repunte del crecimiento en EE UU, mientras que en Europa las elevadas cifras de inflación dejan poco margen para más recortes de tipos. Asimismo, el Viejo Continente empieza notar las consecuencias de la ralentización estadounidense y su crecimiento puede entrar en una fase de letargo.
Algunos expertos añaden que, además, hace falta que los inversores recuperen la confianza en la Bolsa. En los últimos años las caídas suponían una buena oportunidad para tomar posiciones. Ahora los descensos aumentan el temor a que sea el inicio de una nueva tendencia a la baja", apuntan los analistas de Citibank en un informe.
Lufthansa provoca que Amadeus pierda un 4,15%
Amadeus fue el viernes una de los protagonistas de la sesión tras conocerse que uno de sus socios principales, la alemana Lufthansa, anunciará una emisión de bonos convertibles en acciones de la central de Reservas.
El anunció provocó una avalancha de ventas sobre Amadeus, que llegó a perder un 5%, aunque al cierre de la sesión marcó un retroceso del 4,1%, el segundo mayor del Ibex.
La maniobra de la compañía aérea alemana fue interpretada por los inversores como la confirmación de que la participación de Lufthansa en Amadeus (actualmente del 18%) es cada vez más especulativa y menos estratégica.
Lufthansa anunció que emitirá 41.600 millones de pesetas (250 millones de euros) en deuda con una madurez de cinco años, que a su vencimiento podrán ser canjeados por títulos de Amadeus.
Si todos los que acuden a la emisión realizaran el canje, la alemana reduciría hasta el 14% su participación en la central de reservas de viajes.
La caída en Bolsa sufrida ayer por Amadeus erosionó las ganancias acumuladas a lo largo de las últimas dos semanas, que hasta el cierre del jueves acumulaban un ascenso del 6,77%.