El BCE no descarta una intervención en apoyo al tipo de cambio del euro
El Banco Central Europeo (BCE) atraviesa una situación "difícil" para definir su política monetaria, debido a la coincidencia de la ralentización del crecimiento y las tensiones inflacionistas en la zona euro, según su economista jefe, Otmar Issing, que no descartó una intervención de la entidad en apoyo del euro.
"Nos encontramos en una situación difícil, con una combinación en la que el crecimiento se ralentiza y la inflación se acelera", afirmó durante un encuentro con periodistas en Francfort.
Se trata de la primera vez que un miembro del consejo ejecutivo del BCE reconoce que el instituto emisor se enfrenta a un dilema para perfilar su política monetaria. Para numerosos economistas, esta situación podría limitar el margen de maniobra del eurobanco para una bajada de los tipos de interés.
Issing reconoció que el BCE "subestimó los efectos inflacionistas" de las crisis alimentarias derivadas de la enfermedad de las vacas locas y la fiebre aftosa, y calificó de "muy elevado" el nivel de precios registrado el pasado mes de abril. Por otro lado no descartó una eventual intervención del BCE para apoyar al euro, subrayando que esta medida forma parte del "arsenal" con que cuenta la entidad. "Las intervenciones forman parte del arsenal de un banco central", afirmó, añadiendo que "se utilizan primero y luego se habla de ellas".
æscaron;ltima peseta
La divisa europea subió ayer al cotizarse en el mercado de Francfort a 0,8517 dólares, frente a los 0,8495 dólares del martes. El Banco Central Europeo fijó el tipo de cambio oficial del euro en 0,8542 dólares.
Por último y tras 132 años de historia, la peseta dejará de fabricarse el próximo martes 19 de junio, como paso previo a su desaparición de circulación el 28 de febrero de 2002, según informaron a Efe fuentes del Banco de España. La última moneda será una pieza de 100 pesetas, que rendirá homenaje a la que ha sido la unidad fraccionaria de España desde 1869.
Fechas definitivas de canje
El BCE ha hecho públicas las fechas límite para cambiar las monedas nacionales de los Doce.
Alemania es el único país donde no convivirán las dos monedas a partir de 2002, como sí sucederá en el resto, durante al menos dos meses, salvo en Holanda, hasta finales de enero. Los plazos de cambio son amplios en los bancos centrales, salvo en Portugal, un año para las monedas.