El grupo Tragaluz entra en el negocio hotelero
El grupo Tragaluz construirá su primer hotel en Barcelona. La familia Esteva-Tarruella invertirá 1.300 millones para levantar un establecimiento de 60 habitaciones al lado del popular restaurante La Puñalada del paseo de Gracia. La empresa, con siete restaurantes en la Ciudad Condal, facturó 2.050 millones de pesetas el año pasado.
El grupo de restauración Tragaluz ha emprendido su octavo proyecto en Barcelona, aunque en este caso ha servido para diversificar su oferta al sector hotelero.
La compañía capitaneada por Rosa María Esteva construirá su primer hotel en la calle Rosellón, al lado del paseo de Gracia, en un edificio contiguo al histórico restaurante La Puñalada, que lleva cerrado varios años y que Rosa María Esteva ha comprado a unos familiares para recuperarlo. Esteva afirmó ayer que alquilará durante dos años este local a Caja Madrid. La construcción del hotel durará entre 18 y 24 meses, con una inversión de 1.300 millones de pesetas (7,81 millones de euros), y contribuirá a aumentar la oferta hotelera de la ciudad, con 60 habitaciones más. "Nos dijeron que podíamos instalar hasta 80 habitaciones, pero hemos preferido garantizar los niveles de calidad que queremos", aseguró Esteva.
La responsable del grupo añadió que "no tenemos un plan de crecimiento establecido, nos guiamos básicamente por la intuición". Esteva indicó que la empresa aún no ha previsto dar el salto a Madrid. "Nos han propuesto cosas, pero preferimos estar pegados al terreno y observar cómo funcionan los proyectos.
El grupo Tragaluz facturó 2.050 millones de pesetas (12,32 millones de euros) el año pasado, un 46,4% más que los 1.400 millones de pesetas (8,41 millones de euros) del ejercicio de 1999.
Nuevos proyectos
La previsión para este año pasa por alcanzar los 2.300 millones, teniendo en cuenta la entrada en explotación del restaurante El Principal, inaugurado en diciembre. Este local, presentado ayer a los medios de comunicación, incluye varios espacios dedicados a reuniones de directivos y empresas.
El grupo cuenta actualmente con siete restaurantes en Barcelona y uno en Calella de Palafrugell (Girona). La primera iniciativa nació en 1987, cuando Rosa María Esteva y Tomás Tarruella abrieron el restaurante El Mordisco, hoy cerrado precisamente por las obras del hotel que el grupo construye en la calle Rosellón. Tragaluz fue inaugurado en 1990, dando nombre al grupo. El Agua se abrió en 1997, ubicado debajo del Hotel Arts. Ese mismo año, Tragamar inició su andadura en Calella. Más tarde se incorporaron Acontraluz, en el barrio barcelonés de Sarrià; Negro, en la Diagonal, y El Japonés, un nuevo concepto de cocina oriental.
El último proyecto del grupo es la construcción de un restaurante en la torre del puerto Jaume I, en el World Trade Center.
El establecimiento estará abierto en marzo de 2002, integrado en la zona más moderna de la Ciudad Condal, con vistas al mar. Sin embargo, la filosofía será la misma que la de todo el grupo: una cocina cosmopolita europea.