Las Bolsas europeas, insensibles a la mejora sostenida de los mercados de EE UU
La jornada de ayer es una prueba más, irrefutable, de que las Bolsas europeas son más sensibles al debilitamiento del Nasdaq que a sus repuntes. Incrementaron las pérdidas al cierre, cuando el índice de Estados Unidos perdía más de un 1%, pero no subieron con el alza del 3,61% de la víspera.
La recuperación de Wall Street no se traslada a Europa, lo que ensancha la brecha entre ambos mercados. La apatía se ha instalado en las Bolsas europeas. Ni la subida de los futuros estadounidenses en la mañana ni la remontada del Nasdaq y el Dow Jones en la sesión precedente (subieron un 3,61% y 1,03%, respectivamente) sirvieron de estímulos ayer para los mercados del Viejo Continente. Se dejaron llevar, una vez más, por el debilitamiento que registraba el Nasdaq poco antes del cierre europeo. Todos cerraron en negativo.
La tónica que ha seguido Europa en las últimas jornadas tiene como resultado la ampliación de diferencias sobre Estados Unidos. El Nasdaq y el Dow Jones iniciaron una importante recuperación a finales de abril que han conseguido sostener hasta la fecha. Desde el 30 de abril, estos mercados han recuperado un 21% y 12%, y han situado sus balances anuales en una ganancia del 2,8% en el caso del Dow Jones y en una bajada del 9,6% en el del Nasdaq. El índice tecnológico estadounidense, que es el principal referente para los mercados financieros del mundo, llegó a perder hasta un 33% en el año.
En este tiempo, el Ibex ha recuperado tan sólo un 2,39%, aunque mantiene el mejor balance anual de Europa, con un saldo positivo del 4,62%. La evolución que ha dibujado el Euro Stoxx 50 ha sido ligeramente superior a la española (+6,78%).
Los analistas relacionan este distanciamiento, sobre todo, a la marcha de sus respectivas economías. Fernando Gómez, de Safei, comenta que "las perspectivas de la economía estadounidense son de mejora. Mientras, Europa se mantiene con un euro muy débil que deja al mercado falto de confianza para pensar en una recuperación a corto plazo".
El experto vislumbra un segundo semestre complicado para las Bolsas. "Hasta hace dos o tres semanas parecía que el panorama se dibuja a favor, pero las cosas han vuelto a cambiar. Podemos asistir a un escenario en el que se refleje la recuperación de la economía estadounidense, mientras que ésta continúa debilitándose en Europa". En definitiva, Fernando Gómez espera un comportamiento a peor, "aunque es difícil prever si será permanente".
Jordi Falgueras, de Gaesco, se mantiene en la misma línea. "Europa no tiene un rumbo claro. El fondo, sin embargo, es bueno, pero hay un conglomerado de factores negativos que no dejan paso a la recuperación de las Bolsas". Para Falgueras uno de los pesos pesados a corto plazo van a ser las telecomunicaciones. "Tradicionalmente este tipo de valores tiene mayor impacto en Europa que en Estados Unidos, sobre todo los de telefonía móvil". "Lo que ha pasado con KPN ha sido un claro ejemplo", dice.
Falgueras considera que los inversores tienen serias dudas sobre el endeudamiento de estas empresas y sobre sus gestión futura".
Ignacio Lecanda, de Europea Popular Inversiones, opina que "es preferible seguir con cautela a corto plazo, aunque a medio plazo el panorama se presente un tanto más favorecedor". Los inversores siguen con mucho miedo y esperan una señal mínima de confianza para volver a confiar en la renta variable", dice. Lecanda recomienda ser prudentes con los valores más expuestos, como son los tecnológicos.
Las Bolsas europeas demostraron ayer por enésima vez que son más sensibles a a los recortes del Nasdaq que los repuntes. Telecos y petroleras lastraron los índices.
Carlos Fernández, nuevo protector del inversor
La Bolsa ha nombrado a Carlos Fernández González nuevo protector del inversor en sustitución de José Manuel Lagos, que ocupaba este cargo desde el mes de octubre de 1991.
Carlos Fernández es consejero y miembro de la comisión permanente de la Rectora de Madrid. Según sus propias palabras, asume la tarea de ser protector del inversor "con el objetivo de dar continuidad al alto nivel alcanzado por su antecesor, aunque éste ha puesto el listón muy alto en el desarrollo de estas funciones".
En los nueve años de funcionamiento de la oficina del protector del inversor se han tramitado 1.826 expedientes y se han atendido más de 30.000 visitas y 150.000 llamadas telefónicas, que equivalen a una media diaria de 75.
La aceptación de esta figura entre los inversores tiene fiel reflejo en el incremento que han tenido los expedientes en los últimos años. Se ha pasado de los 162 realizados en el primer año de la puesta en marcha de la oficina a 341 en 2000.