Schweppes compra Orangina a Pernod por 116.000 millones
El grupo británico Cadbury Schweppes anunció ayer haber alcanzado un acuerdo preliminar con la compañía francesa Pernod Ricard para adquirir su filial de bebidas refrescantes por un total de 700 millones de euros (116.000 millones de pesetas).
La multinacional británica Cadbury Schweppes, tercera compañía mundial de bebidas refrescantes, ha alcanzado un acuerdo con el grupo francés Pernod Ricard para adquirir el grupo Orangina. Schweppes pagará un total de 116.000 millones en una operación que incluye los negocios europeos, de Norteamérica y de Australia de Orangina, así como las marcas de bebidas de chocolate Yoo-Hoo y la división de zumos Pampryl.
Adicionalmente, Pernod Ricard se ha asegurado una opción de venta irrevocable de sus negocios de bebidas refrescantes en América Latina, Reino Unido y Asia a Cadbury Schweppes. La actividad en estas zonas supone alrededor del 5% de la cifra de negocio de la división de bebidas refrescantes de Pernod Ricard.
Ambas compañías han optado por condicionar la transacción a la firma de un acuerdo con los representantes sindicales y al visto bueno de competencia. Los trabajadores ya dejaron ver ayer, nada más conocer la operación, su preocupación por el mantenimiento de los puestos de trabajo. Actualmente Orangina cuenta con 1.000 trabajadores.
Fortalecimiento
La transacción supondrá para Cadbury Schweppes doblar su actual cuota de mercado en Francia y añadirá 466 millones de euros (77.535 millones de pesetas) a sus ingresos consolidados y 63 millones de euros (10.482 millones de pesetas) en resultados operativos. Además supondrá un claro reforzamiento de su estrategia de fortalecimiento en Europa.
Pernod Ricard utilizará los ingresos de la venta de su filial para financiar la adquisición de parte de la división de bebidas alcohólicas de Seagram, que compró conjuntamente con el grupo británico Diageo por 3.500 millones de dólares.
No es la primera vez que Pernod Ricard intenta la venta de Orangina. Hace un par de años cerró un preacuerdo con Coca-Cola, pero las autoridades francesas de la competencia derribaron el plan.
Precisamente el comprador es ahora la división de bebidas de Cadbury Schweppes, un área a la que la multinacional británica hace unos años puso la etiqueta de "no estratégica". De hecho intentó vendérsela íntegramente a Coca-Cola, pero de nuevo las autoridades de la competencia europeas no autorizaron la operación.
Cadbury Schweppes cierra así lo que será su primera operación de compra en Europa continental este año. La segunda está previsto que sea la adquisición de la española La Casera, con cuyos accionistas parece haber firmado ya un acuerdo preliminar.
Sin embargo, hasta el momento, Cadbury Schweppes únicamente ha reconocido estar en conversaciones preliminares con IBG.