La UE ve poco margen para ceder capacidad normativa a las regiones
La Comisión Europea ve margen de maniobra para conceder capacidad normativa a las comunidades autónomas en los impuestos especiales, aunque advierte de que éste es muy estrecho.
Madrid ha abierto consultas formales con las instancias comunitarias para asegurarse de que su reforma del sistema de financiación autonómica no vulnera las normas comunitarias.
La Comisión Europea, en una evaluación preliminar, considera que "existe margen de maniobra" en los impuestos especiales, según un funcionario del Departamento de Mercado Interior y Fiscalidad. La Comisión advierte, no obstante, que las CC AA deberán respetar siempre los tipos mínimos fijados en 1992 para los impuestos especiales sobre alcohol, tabaco y carburantes.
Cualquier rebaja de esos mínimos que deseen adoptar exigirá la notificación a Bruselas y el respaldo unánime a la medida por parte de los 15 Estados miembros.
Bruselas recuerda asimismo que compete a los Estados centrales el ordenamiento institucional, fiscal, administrativo, etc., que deseen adoptar, siempre que sea compatible con los Tratados de la Unión Europea.
En el terreno fiscal, la principal limitación que imponen los tratados pasa por que todos los impuestos especiales respeten la unidad del mercado interior. No se podrá discriminar ningún producto procedente de otra región comunitaria. El interlocutor de la Comisión, en caso de violación de esta norma, es siempre el Estado miembro. La Comisión es tajante, en cambio, en cuanto a la imposibilidad de introducir diferentes tipos en el impuesto sobre el valor añadido (IVA) en las CC AA. "Hace dos meses ya mantuvimos un encuentro con el Gobierno español", recuerdan en el Departamento de Fiscalidad, "y les informamos de que es imposible que las regiones de los Estados miembros modifiquen el tipo de IVA general".
El comisario europeo de Fiscalidad, Frits Bolkestein, compartirá hoy mesa en el Consejo de Ministros de Economía con el vicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato. Se trata del primer encuentro público al más alto nivel entre Gobierno y Comisión desde que Madrid lanzase al iniciativa sobre la transferencia de impuestos especiales a las CC AA.
El comisario no es un entusiasta de la divergencia entre los tipos impositivos. "Un alto grado de armonización en la fiscalidad indirecta es esencial porque este tipo de impuestos pueden crear obstáculos a la libre circulación de servicios", sentencia la comunicación que, a instancia suya, aprobó la Comisión en mayo. Por ese motivo, Bolkestein investiga precisamente el impuesto a la banca privada anunciado recientemente por la Junta de Extremadura. Aun así, Rato no tira la toalla.
Ayer, el vicepresidente económico resaltó que España todavía no ha recibido una "respuesta oficial" o negativa alguna de Bruselas sobre la cesión de capacidad normativa a las comunidades.
Participación en los Consejos de Ministros
El ministro de Administraciones Públicas, Jesús Posada, aseguró ayer que no descarta que las comunidades autónomas puedan llegar a participar en los Consejos de Ministros de la UE, pero que, en cualquier caso, dicha hipótesis debe plantearse como "un punto de llegada, y no como un punto de salida·".
Actualmente las comunidades tienen voz ya en 55 comités de gestión de la UE, y se pretende que lo hagan en más de 100. El ministro reconoció que la decisión es "política", pero previamente a ello "tienen que estar resueltos todos los problemas técnicos". Entre ellos, destacó la necesidad de delimitar claramente la finalidad y el modo de representación.
De hecho, los Ministerios de Asuntos Exteriores y Administraciones Públicas y las CC AA están ya trabajando en una subcomisión para resolver estos aspectos y determinar, entre otros asuntos, "cómo puede establecerse un sistema para que todas las comunidades estén representadas sea cual sea la que se siente allí".
La voluntad del Gobierno para avanzar en esta negociación fue elogiada ayer por el consejero de Presidencia andaluz, Gaspar Zarrías, quien, no obstante, lamentó que estas buenas intenciones "no terminen de plasmarse" en un papel, al igual que el reparto de fondos estructurales.