Los agricultores consideran ilegal la liberalización del término 'bio'
La decisión del Ministerio de Agricultura de liberalizar la utilización del vocablo bio en los productos alimentarios podría contravenir la normativa comunitaria, según los productores de agricultura ecológica. De hecho, los tribunales vascos suspendieron una norma similar el pasado año.
Con ser dudoso que la generalidad de los consumidores asocien el término bio a los contenidos de una bacteria, no es nada evidente que al mismo tiempo divorcien ese término de los métodos de producción ecológica. La orden examinada (...) no es conforme a la regulación comunitaria, por lo que procede adoptar la medida cautelar interesada. En atención a lo expuesto, la sala acuerda (su) suspensión cautelar (...)" .
Este párrafo, de un auto del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, llena de esperanza a los productores españoles de agricultura ecológica. Piensan que el reglamento del Ministerio de Agricultura que autoriza la utilización del término bio para cualquier producto alimentario, hecho que según ellos puede provocar su ruina, también puede ser paralizado.
"El Gobierno ha hecho una interpretación alegal de la normativa comunitaria. Ha hecho una interpretación fuera del reglamento porque se olvida de que éste se reserva para el producto ecológico las indicaciones que sugieran al consumidor una producción ecológica, y bio, sin ninguna duda, las sugiere", explica el Gabinete Jurídico del Comité Andaluz de Agricultura Ecológica.
Este organismo ha presentado una batería de recursos contra la norma decretada por Agricultura. Ha denunciado el documento en la Unión Europea para que se inicie un proceso de infracción contra España; ha presentado una queja al Defensor del Pueblo Andaluz y la próxima semana recurrirá la medida ante el Tribunal Supremo. El comité andaluz considera que esta norma asesta un duro golpe a la todavía incipiente agricultura ecológica en España y está convencido que el Gobierno terminará retirándola "por ilegal".
Por su parte, el director general de Alimentación, Francisco Simón, considera que el reglamento permite a los países miembros proteger uno o todos los términos (biológico, ecológico u orgánico), y que sólo Alemania ha protegido dos términos, ecológico y biológico.
El controvertido documento (CE 1804/1999) dice que se utilizarán como indicaciones referentes a los productos derivados de la agricultura ecológica los que "sugieran al comprador que el producto, sus ingredientes o las materias primas se han obtenido de acuerdo con las normas de producción ecológicas".
Este artículo fue utilizado, según el comité ecológico andaluz, por los tribunales vascos para paralizar la regulación del término bio en Euskadi, por lo que estiman que el Tribunal Supremo actuará de forma parecida.